Celebra ITL sus 50 años

"Iniciamos labores con muchas limitaciones, pero con mucho entusiasmo", dijo hace 50 años a los alumnos Jacobo Villalobos Tagle, director del recién fundado Instituto Tecnológico de La Laguna.

Eran estudiantes hijos de campesinos, iniciaron sus cursos el 20 de septiembre de 1965, según el libro "50 Años; Memoria y Temporalidades Atrapadas", de Ricardo Coronado Velasco, escritor y maestro del Tecnológico, basado en una publicación hecha por El Siglo de Torreón.

Sin embargo, la fecha oficial de la apertura establecida por la institución es el 26 de septiembre de 1965.

Los estudiantes fueron albergados en un edificio situado en lo que ahora es el Hotel Marriot, en el Bulevar Independencia. Entonces era un edificio conocido como el edificio "Dina-Renault" (y el Bulevar era conocido como el Bulevar Torreón).

Las materias de tecnología se tomaban en Centro de Capacitación de Gómez Palacio, mientras se adecuaban las instalaciones ubicadas sobre Revolución y Calle 13.

Sin embargo, para el primer semestre de 1966, el Tecnológico ya ocupó el sitio donde se encuentra actualmente.

La apertura del Tecnológico fue un logro para la sociedad lagunera y las autoridades de aquel entonces, quienes trabajaron de manera sinérgica con la finalidad de instalar una institución que abriera las puertas a todas y todos los y las laguneras.

La noticia fue publicada en los principales diarios de la ciudad, entre ellos El Siglo de Torreón, debido a que fueron tres décadas de lucha para lograr la instalación de esta institución en la ciudad.

"En realidad se trató de un proceso que duró alrededor de 30 años. Es decir, las evidencias más lejanas de las que se tienen registro datan de finales de los años 20, principios de los 30. Durante tres décadas se intentó inútilmente fundar una escuela técnica que preparara al capital humano que la industria lagunera, en constante crecimiento, iba necesitando", dice Coronado Velasco.

Con el tiempo, el concepto de la institución que pretendían fue evolucionando.

"Así se fueron acumulando los esfuerzos de asociaciones, de empresas, de los mismos gobiernos municipales y estatales, de la sociedad lagunera en general, encaminados a lograr instaurar primero una Escuela de Artes y Oficios, luego una Escuela Técnica Industrial y finalmente un Tecnológico".

Algunos factores que identifica el autor para la consolidación del proyecto es el histórico, que comprende el proyecto nacional de educación técnica, que se fue conformando desde la cúpula del estado mexicano, desde iniciado el México independiente; y, además, los esfuerzos acumulados en La Laguna de 30 años de intentos frustrados por instaurar aquí una escuela de educación técnica.

Otro, el factor social, que incluye la opinión pública publicada en los periódicos, que durante 30 años estuvo "picando piedra" en pro de la educación técnica lagunera; las condiciones demográficas favorables de la década de los sesenta; una sociedad lagunera totalmente participativa, a través de asociaciones, de cámaras, de particulares, etc.; y una serie de estrategias federales y estatales dirigidas a la promoción de la educación técnica.

Un tercer factor, el económico, que encierra aspectos como la existencia en la región -en la década de los 60- de una industria consolidada, de una agroindustria creciente, de un sector de servicios ya en pleno vuelo, de una actividad bancaria intensa. En fin, de unas condiciones económicas que propiciaban y hasta exigían la presencia de un tecnológico en La Laguna.

Y, finalmente, el factor político. "Aquí podemos identificar procesos, como las estrategias emanadas de las políticas del 'desarrollo estabilizador', que impulsó la industrialización de México. Pero también se reconocen personas, como el gobernador de Coahuila entonces, Braulio Fernández Aguirre; el presidente municipal de Torreón, en aquella época, ingeniero Heriberto Ramos González; y otras personalidades que fueron clave para impulsar el proyecto", dice Coronado Velásco.

El autor del libro, destaca, sin embargo, la participación decidida de la sociedad lagunera, quien no sólo impulsó el proyecto, sino que colaboró activamente para hacerlo realidad.

"Esto fue clave. La sociedad hizo propio el proyecto, no fue una obra de una persona (…) La Federación le dijo a la sociedad lagunera; sí ponemos el Tecnológico, pero necesitamos 9 mil pesos. En aquel entonces era mucho, -la Federación pone tres, el estado pone tres y ustedes ponen los otros tres-, Braulio Fernández, dijo: sacamos los tres. Ahí es donde la personalidad de Heriberto Ramos me impactó, un poder de convocatoria que reunieron los 3 mil pesos, todos cooperaron", cuenta el maestro.

El motivo, era su tecnológico. "Iba la gente a cooperar a la presidencia, dos maestros pusieron 100 pesos, que para un maestro de esa época que estaba muy mal pagados, hice cuentas y eso equivalía a 3 mil ó 4 mil pesos, pero todos creían en el proyecto era su Tecnológico, el tecnológico que a lo mejor sus papás habían soñado".

Según lo escrito en las páginas de El Siglo de Torreón, tomado como una de las referencias por el autor para la elaboración del libro, se hicieron diferentes eventos destinados a recaudar fondos como festivales taurinos, así como aportaciones por grupos o sectores agroindustriales.

Fue el Tecnológico número 13 a nivel nacional.

Rogelio Valdés Sánchez, comenzó a trabajar como maestro en el Tecnológico de La Laguna en Octubre de 1965 ya que en aquel entonces era maestro del CECATI a donde fueron enviados los estudiantes para las tecnologías.

Platica que una vez terminadas las instalaciones actuales, se cambiaron para Torreón en donde, durante los primeros días, fue difícil trabajar, ya que los grupos eran separados por mantas.

"A veces se entendían barbaridades, porque entendían palabras de las que decían en otros lados, teníamos que hacer acopio de recursos didácticos muy antiguos", narra entre risas.

Valdés Sánchez fue el primer entrenador del equipo de Futbol Americano del Tecnológico.

"Me toca ser el entrenador, me entrevistó un difunto compañero de usted de apellido Marina Miravalle, él me va a entrevistar y me dice: ¿cómo se va a llamar el equipo?, le dije: serán gatos muertos, me dice no queda, serán gatos negros porque el Tecnológico es el número 13, está ubicado en la Calle 13 y quien se tope con los Gatos Negros tendrá mala suerte".

Alfonso Javier Mijares Contreras, es docente fundador del ITL y a 50 años de la entrada en función del Tecnológico, sigue en funciones.

El docente recuerda el inicio de clases aquel día. "Empezamos con muchas limitaciones, pero con mucho amor al Tecnológico. Ese primer día, lo empezamos con la esperanza de que iba a crecer y que íbamos a forjar un gran futuro para los jóvenes que no tenían educación superior a nivel tecnológico".

A 50 años el maestro dice que mientras su salud se lo permita, seguirá en la función docente por vocación.

"La contabilidad pública fue mi profesión, pero la docencia fue mi vocación y la he ejercido con entrega disciplina, orden y respeto, si renuncio a mi vocación de maestro me renuncio a mi mismo".

En medio siglo el Tecnológico de La Laguna ha forjado a más de diecinueve mil doscientos egresados; una oferta educativa que incluye los niveles de licenciatura, maestría y doctorado; un cuerpo de profesores de alto nivel académico, un cuerpo sólido de investigadores con niveles 1. 2 y 3 del Sistema Nacional de Investigadores; y una serie de proyectos de investigación científica y desarrollo tecnológico en beneficio de la comunidad lagunera y del país.

CONMEMORAN ANIVERSARIO

Ayer se realizó la ceremonia magna del 50 aniversario de la institución con un agradecimiento a los hombres y mujeres que hicieron posible la creación del Tecnológico de La Laguna y de quienes apoyaron para que se consolidara como una de los más importantes a nivel regional y nacional.

La ceremonia inició poco antes de la una de la tarde, contando con la presencia de Manuel Quintero Quintero, director general del Tecnológico Nacional de México; Jesús Ochoa Galindo, secretario de Educación de Coahuila; Ana Sofía García Camil, secretaria de Cultura del Estado; Miguel Mery, primer regidor del Ayuntamiento de Torreón; Miguel Ángel Cisneros Guerrero, director del ITL, entre otras personalidades de la política, exdirectores, egresados, docentes en activo y ex maestros y maestras, así como estudiantes.

La ceremonia inició con una reseña de los inicios del Tecnológico de La Laguna, cuya fecha se celebra de manera oficial el 26 de septiembre.

En su intervención el director del Tecnológico, Miguel Ángel Cisneros, agradeció a todas y todos los que hicieron posible el surgimiento y la consolidación de esta institución.

"Estoy convencido que es a través de estas generaciones que vamos a poder transformar a nuestro país, sirva pues esta ceremonia para conmemorar el pasado y vislumbrar el futuro de nuestra querida institución, sirva también para recordar a todos aquellos hombres intelectuales y empresarios que estuvieron a la altura de su tiempo que supieron concebir una noble y visionaria idea y que con talento, espera y fe inquebrantable, dieron vida y sustento a esta gran obra educativa".

Por su parte, Manuel Quintero Quintero anunció la creación de un Centro de Investigación en Desarrollo Tecnológico de Innovación en Energías Renovables, además del Evento Nacional de Innovación de los Institutos Tecnológicos, el más importante de México, en su tipo en donde el ITL será la sede de este año.

El director nacional de institutos tecnológicos reconoció además la labor que ha cumplido a lo largo de medio siglo esta prestigiada institución.

"El ITL seguirá siendo una institución prestigiada, reconocida, de y para la comunidad coahuilense, 50 años de historia nos respaldan", dijo.

Durante la ceremonia se entregaron reconocimientos a las y los directores, el primero en recibirlo fue Jacobo Villalobos Tagle, el primer director de la institución.

También se reconoció a los docentes fundadores en donde sobresalió el maestro Alfonso Mijares, quien, a 50 años, continúa dando clases en la escuela.

Al igual que docentes y directivos, las y los egresados destacados fueron reconocidos y reconocidas dentro de esta ceremonia.

Para continuar con la conmemoración, en sesión solemne, el Cabildo de Torreón rindió un reconocimiento al Instituto Tecnológico de La Laguna (ITL).