Brindis. Durante la cena de Estado de ayer, el presidente Peña y el de Francia, Francoise Hollande, estrecharon lazos.
En una conferencia de prensa conjunta celebrada en París, los presidente de México y Francia, Enrique Peña Nieto y Francoise Hollande, celebraron los más de 60 acuerdos signados durante la visita de Estado del mandatario mexicano a Francia.
El presidente Peña Nieto destacó las aportaciones para que ambas naciones trabajen conjuntamente en términos culturales, educativos, comerciales, médicos y de desarrollo sustentable y medioambiente.
El mandatario celebró que México se sume a la propuesta de Francia para que en la COP 21 por celebrar, se impulse a los países a signar una resolución vinculante para reducir las emisiones gases de efecto invernadero.
"México se congratula de ello, ve en Francia a un aliado estratégico y quiere caminar del lado de Francia", dijo el presidente.
En materia de cultura y educativa, Peña Nieto dijo que se realizarán intercambios educativos y buscará que el próximo año se realice una exposición de arte mexicano en París.
Además anunció la creación de "La Casa Mexicana", que es un proyecto cultural-gastronómico para que México tenga presencia en Francia y contará con financiamiento de empresarios mexicanos y, posteriormente, franceses.
Destacó que la relación comercial va en aumento desde hace tres años, cuando los presidente se reunieron por primera vez.
Por su parte, Francoise Hollande destacó que el comercio entre ambos países aumentó un 10 % anual en lo últimos tres años.
"Me complace mucho que está visita de estado reúna esas características para demostrar que dos grandes países como México y Francia mantengan ese intercambio", dijo Hollande.
Rinden homenaje
Enrique Peña Nieto, descubrió una placa conmemorativa en honor de Gilberto Bosques Saldívar, cónsul de México en Francia durante la ocupación alemana durante la II Guerra Mundial que salvó a decenas de miles del exterminio nazi.
El presidente Enrique Peña Nieto recordó que en el puerto de Marsella, Bosques escribió "uno de los capítulos más memorables y honrosos de la política exterior" de México.