Cesáreas innecesarias

Toda mujer que esté a punto de convertirse en madre tiene derecho a elegir la forma en que traerá a su hijo al mundo, pero también a recibir información veraz y confiable acerca de los riesgos y beneficios de cada una de las posibilidades que existen para elegir la mejor opción.

Por miedo, desinformación o simplemente por “comodidad” del propio ginecólogo tratante, en los últimos 15 años la práctica de cesáreas no justificadas por cuestiones médicas se incrementaron de forma exorbitante.

Ahora, gracias a la información que se encuentra a la mano de las futuras madres y a la presencia de asociaciones que promueven los partos vaginales, éstos van ganando terreno frente a las cesáreas innecesarias.

Jorge Alberto Cantú Ruiz es uno de los ginecólogos que más que estar a favor del llamado “parto humanizado”, apoya el trato humanizado por parte de los médicos, cualquiera que sea su profesión, pues es parte de su ética y sobre todo, de los derechos del paciente.

Pero lo que apoya aún más el médico especialista, es que aquellas futuras mamás se informen y busquen una segunda opinión de un profesional cuando el argumento que presenta su médico al momento de elegir cómo nacerá su hijo no les es convincente.

CESÁREAS JUSTIFICABLES

El ginecólogo dice que si bien existen varias razones por las que se pudiera justificar la práctica de una cesárea, las que más obligan a realizarla son principalmente tres: por causa materna, fetal y mixta.

La primera se da cuando las mujeres presentan problemas de estrechez de la pelvis o bien cuando hay complicaciones con la matriz que contraindiquen el parto.

La causa fetal, se da cuando existe algún problema con el bebé, por lo general cuando son muy grandes, o bien, si existe una malformación que obligue a programar su nacimiento. El médico explica que por definición, los bebés considerados como “grandes” son aquellos que llegan a pesar más de cuatro kilogramos (aunque aclara que no todos los casos obligan a practicar una cesárea).

Las causas mixtas, por otra parte, aparecen cuando existen problemas tanto para la mamá como para el producto, de tal forma que ambos puedan verse beneficiados al interrumpir el embarazo, por ejemplo en caso de una preeclampsia severa, que se presenta cuando se incrementa la presión arterial de la madre y se pone en riesgo la vida de los dos.

En conclusión, el médico recalca que una cesárea es justificable cuando los beneficios se inclinan más que los riesgos con respecto a un parto natural.

MALAS EXPERIENCIAS

La frecuencia con la que las mujeres embarazadas optan por programar una cesárea aumenta cuando poseen poca información confiable y se dejan llevar por la experiencia de terceros.

Cantú Ruiz comenta que son numerosas los casos de futuras mamás que acuden a consulta con ideas erróneas sobre el parto natural, al escuchar los casos de familiares cercanos, amigas o conocidas, cuya experiencia no fue grata. Pero cuando se encuentran bien asesoradas, ya sea porque investigaron por su cuenta o porque acudieron a un curso psicoprofiláctico, conocen bien los riesgos y beneficios de una cesárea frente a un parto vaginal. “No es tan común que esas mujeres pidan una cesárea sin una indicación real”, recalca el médico.

Añadió que más que insistir en practicar una cesárea, sea por costo o comodidad, los médicos tratantes deben brindar información real, con datos actualizados y verídicos. Aunque, según dijo, por ética, deben dejar de lado su comodidad y poner en primer lugar el bienestar del paciente y su bebé.

LOS ARGUMENTOS

En los últimos años las futuras mamás han optado por una cesárea principlamente por cuestiones laborales, ya sea para que la fecha y lugar de nacimiento de su hijo se ajusten a su incapacidad o a determinado período de trabajo.

Pero también existen casos de argumentos no justificados, como el que con la cesárea los riesgos para el bebé y la madre serán mucho menores.

Aunque, de acuerdo con el ginecólogo Jorge Cantú, dentro de los derechos de la paciente, está el poder elegir el tipo de tratamiento que más les convenga, sin importar el caso, insiste que el función del médico brindar asesoría y proporcionar toda la información debida para que pueda contar con alternativas y tomar la mejor decisión, la cual debe ser respetada por el especialista.

“Cuando uno da la información disponible de riesgos, ventajas, desventajas del parto y la cesárea, las pacientes, por lo general, van a terminar escogiendo un parto”, recalca Cantú Ruiz.

RIESGOS Y BENEFICIOS

Cuando se compara el nacimiento vaginal contra una cesárea medicamente injustificada, los riesgos a los que están expuestos tanto la madre como el bebé, pueden incrementarse.

Entre los riesgos que se pueden presentar en las mujeres debido a una cesárea, están las hemorragias e infecciones, así como complicaciones en futuros embarazos. En cuanto a los bebés, tienen más probabilidades de requerir vigilancia extra o cuidados especiales al nacer.

“Esto no quiere decir que sea común, afortunadamente la mayoría de las cesáreas presentan hemorragias, ni quiere decir que se va a morir la mamá, pero es estar buscando problemas donde no los había, aunque tampoco se trata de evitar a toda costa la cesárea y que nazcan todos a como a de lugar por vía vaginal”, insiste el médico.

PARTOS HUMANIZADOS

Más que partos humanizados, lo que las mujeres buscan es un trato más humano durante su embarazo y al momento del nacimiento de su bebé. Y es que para el médico, este término no debería existir, porque toda la atención que debe brindar cualquier médico debe ser así.

El parto humanizado es una moda, pero, de acuerdo con el ginecólogo, es algo que la mayoría de las pacientes están buscando, aun sin conocer el concepto, al querer tener su embarazo en un ambiente agradable, con una mejor atención.

Pero hoy en día gracias a la información que se encuentra al alcance de las futuras mamás, cada vez son más las que optan por esta tendencia, aunque sean pocos los médicos que conozcan la técnica. Y es que más allá del parto tradicional, es decir, sentada con las piernas hacia arriba, ahora las mujeres han solicitado el llevar su trabajo de parto caminando, sentadas, en una alberca o en cuatro puntos, modalidades en las que sólo unos cuantos están capacitados.

“Es parte de lo que debemos de respetar como médicos y también saberlo manejar, hay muchos colegas que por lo mismo que son escasos los partos, o por la misma forma de trabajar de las instituciones médicas, desconocen o no quieren meterse con esas opciones de atención, las desconocen”, reconoce el médico.

Jorge Cantú invita a las mujeres que buscan un embarazo o están por convertirse en madres, a asesorarse, a obtener toda la información necesaria pero siempre de fuentes confiables, como puede ser la Organización Mundial de la Salud o su médico tratante o incluso buscar una segunda opinión.

“Hay que tener opciones e información para tomar una de las decisiones más importantes en la vida, que es el nacimiento de su hijo”.