Pedro (17) anotó el segundo gol en la victoria del Chelsea sobre el Sunderland. (AP)
Chelsea reaccionó al despido de José Mourinho con una contundente victoria por 3-1 ayer ante Sunderland, mientras que Manchester United volvió a tropezar en su estadio y Leicester continuó con su temporada de ensueño y aseguró llegar a la próxima fecha como líder de la liga Premier.
Dos días después del cese de Mourinho, que dejó al equipo a un punto de la zona de descenso, Chelsea se impuso con tantos de Branislav Ivanovic, Pedro Rodríguez y Oscar. Los hinchas corearon el nombre de Mourinho durante todo el partido, y abuchearon a Cesc Fábregas y Diego Costa cuando fueron reemplazados en el segundo tiempo.
Poco antes del encuentro, Chelsea anunció que Guus Hiddink tomará las riendas hasta el final de la campaña.
El capitán de los Blues, John Terry, dijo que entiende el descontento de los hinchas.
"Completamente, y tienen razón", expresó el zaguero central. "Ellos nos han apoyado en los momentos difíciles y estarán allí cuando salgamos adelante tarde o temprano. Si seguimos jugando así, los fanáticos estarán contentos".
En Old Trafford, Cameron Jerome y Alexander Tettey marcaron los goles de Norwich, y Anthony Martial descontó por un United que lució inofensivo y cayó al quinto puesto en la tabla de posiciones.
El equipo de Louis van Gaal no ha ganado en sus seis últimos partidos en todas las competencias, y el timonel holandés podría estar bajo la lupa ahora que Mourinho está en el mercado.
"Sabemos que (perder ante Norwich) no es suficientemente bueno para nosotros", indicó Van Gaal. "Los jugadores lo saben, yo lo sé, los fanáticos lo saben, y la junta lo sabe".
Cuando le preguntaron si cree que cuenta con el respaldo de la junta del club, Van Gaal respondió: "Sí lo creo, pero uno nunca sabe".
Leicester se impuso 3-2 a Everton para sumar su tercer triunfo al hilo y alejarse a cinco puntos de Arsenal y seis de Manchester City, sus escoltas inmediatos que se enfrentan el lunes en el cierre de la 17ma fecha.
Riyad Mahrez anotó dos goles de penal y Shinji Okazaki agregó otro por Leicester, que llegará a la Navidad con 38 puntos. Para la misma fecha el año pasado, era último de la clasificación.