Chiapas es un estado con muchas riquezas naturales sin lugar a dudas. Mejor
Conocido como una potencia agroalimentaria, pocos saben del talento chiapanecoen el desarrollo tecnológico a nivel mundial. Y el sector aeroespacial no es laexcepción.
¿Por qué un estado como Chiapas tan lejos de la industria del centro y norte del país querría entrar a un sector tecnológico y específicamente al aeroespacial? Desde eminentes ingenieros en inteligencia artificial, trabajando en reconocidos centros de investigación nacional, pasando por empresarios prominentes hasta doctores que se desempeñan en el programa aeroespacial Chino, Chiapas tiene presencia (contundente e innegable) en diversos campos del saber orientados a la innovación de base tecnológica.
A partir de la crisis del 2008, muchos oriundos del estado del Sur regresaron a su tierra desde diferentes partes de la república. Esto provocó una mayor tasa de desempleo y a su vez, obligo a buscar nuevas opciones de negocios no tradicionales. Numerosas empresas en Tecnologías de la Información (TI) comenzaron operaciones en esos años, siendo el sector de TI y el de Electrónica los principales responsables del inició de una nueva etapa empresarial en Chiapas.
En enero de 2014, Fomento Aeroespacial del Sur A.C. (mejor conocido como Fomento Aeroespacial y de Tecnologías Especializadas, FATE) nació con la intención de articular e integrar a la industria en estos sectores y orientarla hacia nuevas oportunidades de mercado en el segmento espacial, específicamente en el desarrollo de satélites. Desde entonces se han originado colaboracionesinterinstitucionales con dependencias gubernamentales, diferentes universidades públicas y privadas, instancias de educación media superior y el sector empresarial para dar a conocer mucho más sobre todas las ciencias que convergen en esta compleja y fascinante área del saber.
Las Universidades Politécnicas en el centro y sur del estado están apostandoseriamente a este sector generando en colaboración con FATE y la Agencia Espacial Mexicana (AEM) las llamadas cadenas de valor educativo que nospermitirán potenciar habilidades, generar capacidades y fomentar el emprendedurismo de base tecnológica desde la educación básica hasta niveles de doctorados a través de demostraciones, talleres, certificaciones, líneas de investigación y Start Ups que van construyendo los cimientos de una nueva generación en el sur de México. El Sistema DGTI de educación media superior jugará un papel crucial en este rompecabezas ya que son la piedra angular en el inicio de los ecosistemas de innovación para la generación de recurso humano calificado.
Hoy en día, aunque sigue siendo raro para la mayoría de la población, ya se escuchan noticias relacionadas como convenios estatales con la AEM, equipos que participan en competencias internacionales y que además obtienen lugares de honor (la Universidad Politécnica de Tapachula es la campeona nacional de Robótica en la categoría de construcción para Vex Robotics y lograron el tercer lugar a nivel mundial), proyectos de índole espacial o con alguna integración de subsistemas satelitales, diseños de rovers o aplicaciones para la NASA, temas de manofactura avanzada y percepción remota, entre otras aplicaciones directas de la tecnología satelital.
Son justamente las aplicaciones satelitales las que van a empujar a un nuevo horizonte los sectores estratégicos del estado (agroalimentario y turismo) dando soporte a un sin fin de nuevos productos y servicios en diversas áreas de importancia económica y civil dentro de la entidad.
Chiapas no solo se está conectando a través de las nuevas tecnologías a nuevas fronteras del saber, también está iniciando la conexión a la innovación y a escala mundial, porque cuando hablamos del desarrollo de ecosistemas de innovación a gran escala forzosamente tenemos que hablar de trabajo en equipo sin importar el sector estratégico presente o futuro al que la entidad federativa haga alusión. A la larga, los resultados serán los que hablen por si solos.