China, el gigante de Asia

Con una política de mano dura, con un gran pasado, pero con la vista puesta en el futuro. ¿Es la China del siglo XXI, esa China inmensa, un gran mercado por conquistar o un gran enemigo por vencer?

Existe un capítulo de la historia universal que muy pocas personas conocen y es que durante un período la armada de la dinastía Ming, bajo el mando de Zheng He (1371-1433), planeó una expansión china marítima. Contaba con 337 naves de alta mar, 188 naves de fondo plano adaptadas para navegar en océano, en cuya construcción empleó a 30 mil carpinteros. La flota zarpó en 1405 con 28 mil hombres y tras 28 años de navegación en los que recorrieron las costas de África, Asia, el Atlántico, Arabia e India. Al regresar a China, ya bajo las órdenes de otro emperador, la armada fue reducida a cenizas, al igual que los informes. Sirva la inclusión de este hecho histórico para esbozar el tenaz espíritu del pueblo chino para crear grandes obras, fincado en la estricta disciplina y el orden, características de su milenaria cultura.

Se puede hacer una analogía entre este hecho y el gran crecimiento que ha tenido este país asiático en los últimos años y aun más, cabe preguntarse si hoy China ha construido, en su economía, algo muy parecido a lo que la dinastía Ming logró, es decir, un poder económico con el que puede influir de manera importante en el planeta. La pregunta es si en esta ocasión tomarán la decisión de asumir su papel en la historia mundial como eje de las demás naciones o terminará quemando lo que ha construido, por decirlo metafóricamente, ya sea por malas decisiones o por presiones globales.

De forma opuesta a lo que han divulgado los medios de comunicación en últimas fechas, acerca del tambaleo de la economía china y la devaluación de su moneda, el país oriental sigue siendo considerado por los especialistas como una de las potencias mundiales más poderosas que en un futuro puede desbancar a Estados Unidos.

Un vistazo a la gestión macroeconómica de China en los últimos años nos revela sus fortalezas y debilidades y da una idea de lo que es capaz este país si toma las decisiones correctas.

LAS FORTALEZAS DEL GIGANTE

Esta nación cuenta con mil 300 miles de millones de habitantes, una superficie de 9.5 millones de kilómetros cuadrados y una densidad poblacional de 143 habitantes por kilómetro cuadrado. La capital de la segunda economía por volumen de Producto Interno Bruto (PIB) es Beiging, y su moneda es el yuan chino, cuyo tipo de cambio a septiembre de este 2015 es de un yuan por 2.6 pesos mexicanos.

Para poder entender cuál es el comportamiento económico durante los últimos años de la República Popular China se puede analizar, por ejemplo, el crecimiento del PIB (el valor de todos los bienes y servicios finales producidos dentro de una nación en un año determinado), que en 2014 incrementó un 7.4 por ciento respecto a 2013. El crecimiento ha sido una constante durante los últimos años.

Para ponerlo en perspectiva, en el mismo período que muestra la tabla, el porcentaje de crecimiento más alto que alcanzó México fue de 5.1, en 2010, esto con respecto a 2009, donde hubo un decrecimiento de -4.7 por ciento. Y en 2014 el crecimiento fue de 2.1 por ciento.

Según los últimos datos publicados por el Banco Mundial, en 2014 la deuda per cápita en China fue equivalente a 44 mil 445.26 pesos mexicanos por habitante, mientras que en 2013 fue de 37 mil 987.40 pesos. Así pues, se ha producido un incremento de la deuda por habitante de seis mil 457.86 pesos.

Estos números dan cuenta del éxito de la política económica de China, que tiene como ejes fundamentales la exportación, la industria y la inversión; se hizo una gran inversión para fomentar la instalación de empresas, la construcción de infraestructura que propició este despegue económico.

Muchos especialistas coinciden en que lo que sigue es que el gigante de Asia tenga un papel más decisivo en los servicios y el consumo doméstico y que estos avances se comiencen a reflejar en un aumento del nivel de vida de la población, esto a fin de que el país no deje de crecer económicamente.

INFLUENCIA INTERNACIONAL

En el entorno globalizado que actualmente vivimos, las economías de las diferentes naciones a nivel mundial interactúan formando grupos, bloques y cerrando pactos económicos que fortalezcan su posición frente a los demás actores mundiales. La relevancia de China se refleja en su adhesión a organismos de influencia mundial, así como en los acuerdos comerciales y políticos que mantiene con otras naciones poderosas.

Diálogo de Cooperación de Asia (ACD, según sus siglas en inglés). Está formado por las potencias económicas de Asia, incluidos los principales exportadores e importadores de petróleo, y está orientado a promover la cooperación y el diálogo en una serie de asuntos que incluyen la seguridad alimenticia, energía, financiación y tecnología.

El Grupo de los Veinte (G-20). Es un espacio para la reflexión y un foro para la cooperación donde los países miembros tratan temas relacionados con el sistema financiero internacional, la estabilidad y el crecimiento económicos. Participan países industrializados y economías emergentes.

El Fondo Monetario Internacional (FMI). Promueve la estabilidad financiera y la cooperación monetaria internacional. Asimismo, busca facilitar el comercio internacional, promover un empleo elevado, un crecimiento económico sostenible y reducir la pobreza en el mundo entero. El FMI es administrado por los 188 países miembros a los cuales rinde cuentas.

Organización de las Naciones Unidas. Las Naciones Unidas pueden tomar medidas sobre los problemas que enfrenta la humanidad en el siglo XXI, como la paz y la seguridad, el cambio climático, el desarrollo sostenible, los derechos humanos, el desarme, el terrorismo, las emergencias humanitaria y de salud, la igualdad de género, la gobernabilidad, la producción de alimentos y mucho más.

La Organización de Cooperación de Shanghái (OCS). Es una organización intergubernamental formada por Rusia, China, Kazajistán, Kirguistán, Tayikistán y Uzbekistán. Pese a no ser un bloque militar la organización tiene por objetivo el fortalecimiento de la seguridad en la región, así como a la cooperación económica y cultural.

Países BRICS. El denominado grupo BRICS, formado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, constituye el grupo de países más adelantados entre los Estados con economías emergentes. Tienen en común una gran población, grandes extensiones de territorio, una elevada cantidad de recursos naturales y una fuerte presencia en la economía internacional, con crecimientos importantes de sus PIB, que los hacen especialmente atractivos como destinos de inversión.

ANTE UN RETO

El gran reto de la República Popular China es volver a equilibrar la economía, y es por eso que necesita hacer las reformas necesarias para estimular el consumo interno, esto propiciando que los bancos bajen las tasas de intereses para préstamos personales, tarjetas de crédito e hipotecas. En China se produce a niveles estratosféricos, pero todo se exporta, una gran parte de sus habitantes no tiene posibilidades de comprar.

Otra de las medidas que debe implementar es reducir los apoyos a las empresas, seguida de la reducción los impuestos al consumo y el aumento de gravamanes a las empresas.

La gran mayoría de los especialistas señalan que las perspectivas en el futuro de la economía china son favorables, ya que tiene una gran solidez financiera que se refleja en la gran cantidad de deuda gubernamental de otros países que posee, por ejemplo de Estados Unidos, y de grandes empresas a nivel internacional que encontraron en China una oportunidad de negocio y de financiamiento.

Es decir que los emprendedores nacionales debemos de poner los ojos en Oriente y buscar satisfacer alguna de las necesidades que van a surgir cuando los clientes chinos vean reflejado en su poder adquisitivo las reformas que está haciendo el gobierno de Beijing.

Algunos de los especialistas señalan que la economía de este país es una de las más rentables del planeta, aunque también hay que señalar que el gobierno tiene tendencias de imponer restricciones a las empresas extranjeras, algo normal en economía tan sólidas.

Los detractores comentan que gran parte de esta bonanza reside en la infravaloración estratégica de su moneda frente a las monedas extranjeras (que permite un mayor margen de ganancias al momento de exportar). Aunado a la gran cantidad de exportaciones que superan por mucho las importaciones, aunque cabe mencionar que en los últimos años han ido decreciendo las exportaciones.

Lo cierto es que según estimaciones de Pricewaterhouse Coopers (PwC) en 2050 China será la primera economía a nivel mundial, seguida por Estados Unidos e India en tercero. Ahora la pregunta es para el resto de las naciones ¿Queremos ver a este gigante como enemigo o como aliado comercial?

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