EDITORIAL Caricatura editorial columnas editorial

Colectivo Los Nadies

DAVID PÉREZ

Hacerse cargo de la realidad para transformarla no es "chic". Formarse intelectualmente y organizar la colectividad en dirección a una vida más humana no da asensos sociales ni relaciones poderosas con las se pueda intercambiar beneficios. Menos si se decidió hacerlo sin ejercer un liderazgo ególatra de esos que asumen el altruismo para proyectar su imagen.

Dejar de ser. Optar por existir con nuevos significados, cobra hoy vigencia ante tantos modelos caducos y vacíos. Caducos no por la simpleza de su antigüedad, sino por su aporte o complicidad a un escenario violento que funciona con la lógica de la eliminación progresiva.

El colectivo "Los Nadies" son un grupo de personas de la Comarca Lagunera que surge a partir de la indignación por la impunidad en los delitos electorales en las elecciones presidenciales de 2012 y con influencia de los distintos movimientos generados en la capital del país. Dejaron de ser espectadores o comentadores del presente, optan por ser actores históricos.

Decidieron salir a la calle a manifestar su inconformidad, pero no se quedaron en eso. Optaron por dejar de ser marchistas ocasionales, dejar de ser eternos inconformes pasivos. Para iniciar un proceso colectivo que les permita ser aquellos que resisten a un estilo de vida inhumano. Su presencia en el escenario actual contrasta con la sigilosa voluntad del individuo por una determinada estructura de relaciones.

Dejar de ser dependientes, clientes y consumidores, para ser unos "nadies" autónomos, libres y actores en su contexto. No son una charla de superación personal, son un esfuerzo cotidiano de vivir con dignidad. No los verá usted en los aparadores de reconocimiento social a los que aspira una sociedad excluyente. No responden al modelo de "familia presidencial" que tanto se difunde en este sexenio.

"Los Nadies" se resisten a determinismos históricos. Al mimo tiempo de ejercer dicha resistencia, se convierten en denuncia para aquellos ejercen algún tipo de poder bajo la forma de explotación prolongándose bajo el argumento, simple y cínico de "así funcionan las cosas aquí", "en México es así". Es una resistencia a aceptar "la realidad que les tocó vivir".

Pero también es una denuncia a los que se contentan con responsabilizar del estado actual de las cosas a las minorías empoderadas, son un contraste con los que se justifican a sí mismos por el lugar en el que les tocó nacer o con los que defienden su indiferencia porque aceptan un discurso en el que los individuos "comunes" nunca serán protagonistas.

Ser un colectivo con una estructura organizacional horizontal, con comisiones rotativas, que discierne y decide en grupo, no será nada fácil. No será una opción para quien se acostumbró a ser parte de una sociedad organizada de forma vertical. No sólo en el ámbito público, sino también en el privado -familia y amigos-. Nosotros mismos ¿cómo tomamos las decisiones cotidianas?

Decidieron dejar de ser irresponsables frente a la comprensión de la realidad y por eso provocan un círculo de reflexión que reúne para practicar el simple ejercicio de pensar. Ante el tipo y la forma en que los medios de comunicación privados informan a las mayorías, crearon una gaceta y un sistema de información popular que instalan en lugares de populares como las "fayucas" ofreciendo alternativas de información.

La situación de violencia no los llevó a cerrar calles de su colonia, ni a levantar muros o reforzar chapas, optaron por crear un centro comunitario en una colonia en los márgenes de Torreón destina al trabajo de construcción de paz con niños, promover entre ellos la reflexión colectiva y una educación que supere el individualismo.

Para dejar de ser dependientes de empresas que venden alimentos caros, de mala calidad y que destrozan el ciclo agrícola natural, "los nadies" iniciaron un proceso encaminado a la autonomía alimentaria. Estas áreas de trabajo están encaminadas a dejar de ser alguien convertido en "objetivo de mercado". Optar por ser nadie, porque se resisten a una existencia de consumo y de sin sentido.

Intercambiemos en Twitter: @dtdavid

Leer más de EDITORIAL

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de EDITORIAL

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 1137734

elsiglo.mx