Directivo reconoció falta de dinero, pero vocero asegura que pagarán los 10 millones de dólares de premios de la Copa América.
El vicepresidente de la Confederación Sudamericana de Futbol (Conmebol), Wilmar Valdez, aseveró que el organismo tiene problemas para pagar los premios comprometidos por la Copa América 2015 que se realiza en Chile.
Precisó que dicha dificultad se deriva del escándalo de corrupción que afecta a la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA), en el que varios directivos son investigados por la justicia de Estados Unidos, al igual que muchas empresas vinculadas a la Conmebol.
En entrevista a una radiodifusora chilena, Valdez dijo que “hay una situación real que complica. Hay un involucramiento de las empresas que son las principales proveedoras de los dineros de Conmebol a través de la cesión de los derechos televisivos y sponsors”.
El directivo, explicó que una de las empresas investigadas por Estados Unidos, Datisa, debe otorgarle recursos a la Conmebol por las transmisiones de los partidos de la presente Copa América, pero los recursos están bloqueados por la justicia estadunidense.
El también presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) comentó que, por ese motivo, la Conmebol se contactó con los auspiciadores del torneo de selecciones más antiguo del mundo para que le entreguen los recursos en forma directa al organismo.
“Se ha hecho contacto con los sponsors y ellos también quieren solucionar los temas. Estas empresas, además de tener los derechos televisivos, tienen la facultad de negociar directamente con los sponsors”, aseguró.
Añadió que “estamos intentando con ellos alguna fórmula que nos permita sortear estas dificultades inmediatas para tener un plan hacia el futuro”.
Entre los recursos que aún no llegan a Chile se encuentran los cuatro millones de dólares para el campeón, tres millones de dólares para el subcampeón, dos millones de dólares para el tercero y un millón de dólares para el cuarto.
Tampoco se encuentran disponibles los recursos para solventar los gastos de alojamiento y alimentación de las 12 selecciones participantes, razón por la cual el gobierno chileno habría aceptado servir de aval en tanto se liberan los fondos de Conmebol.
