Somnolencia, irritabilidad, dificultades en la atención, la concentración y la memoria, son algunos de los efectos negativos del cambio de horario en el organismo humano. (ARCHIVO)
Este domingo pasado, inició el horario de verano en México, con el cual los relojes debieron adelantarse una hora con el propósito de aprovechar la luz solar por las tardes y generar un ahorro en el consumo de energía eléctrica.
Este cambio de horario, como se ha explicado anteriormente, produce algunos efectos negativos en el organismo humano, entre los que se encuentran somnolencia, irritabilidad, dificultades en la atención, la concentración y la memoria; fatiga; baja en el rendimiento; menor productividad; malestar general; disminución del ánimo; trastornos gastrointestinales y del apetito, según detalla el portal redsalud.uc.cl
No obstante, la misma fuente enlista una serie de consejos que bien pueden servir para adaptarse con mayor facilidad al cambio.
Entre las recomendaciones se encuentran fijar la hora de dormir y despertar; no dormir durante el día y, si se hace, no excederse de los 45 minutos de sueño; no beber alcohol en exceso ni cuatro horas antes de acostarse; no tomar cafeína seis horas antes de acostarse y no ingerir comidas abundantes, picantes o muy dulces cuatro horas antes de acostarse.
Asimismo, se sugiere no practicar ejercicio inmediatamente antes de acostarse; dormir en una cama cómoda, fijar una temperatura adecuada y mantener la buena ventilación; eliminar luces innecesarias y bloquear ruidos, y usar la cama sólo para dormir, no para trabajar o recrearse.
De acuerdo con redsalud.uc.cl, seguir estos consejos permitirá tener un buen sueño que otorgue el descanso necesario para las actividades diarias, aún con el cambio de horario.
