EDITORIAL Caricatura editorial columnas editorial

Corredor Chapultepec

Jaque mate

SERGIO SARMIENTO
"Democracia es la teoría de que la gente común sabe lo que quiere y merece obtenerlo."

— H.L. Mencken

Se ha tratado de presentar el Corredor Cultural Chapultepec como un proyecto similar al icónico High Line Park de Nueva York, pero hay una diferencia fundamental: el High Line es la recuperación de una infraestructura ya construida y que, como tantos segundos pisos, era cuestionada por su fealdad cuando formaba parte del New York Central Railroad, mientras que el corredor implica la construcción de un nuevo segundo piso.

El proyecto promovido por Simón Levy del gobierno de la ciudad de México es bastante atractivo. No comparto la crítica de intelectuales y activistas políticos que consideran inaceptable que un espacio público pueda hacerse con recursos privados y financiarse con comercios. De hecho, me parece que uno de los puntos más positivos del proyecto es que no requiere de recursos de los contribuyentes.

La avenida Chapultepec y la adyacente Zona Rosa (aclaro interés, soy vecino) necesitan un urgente remozamiento. Su deterioro es notable a pesar de su ubicación estratégica y de los diversos planes de mejoramiento de la Zona Rosa que hemos visto en el pasado, los cuales parecen no haber tenido más propósito que generar corrupción y vender las aceras al comercio informal.

Lo que más me preocupa del proyecto del corredor es que no estoy seguro que los comercios puedan atraer un flujo suficiente de clientes en un segundo piso. Si la gente no sube las escaleras, los comercios corren el riesgo de quedar abandonados como muchos de los que se encontraban en los deprimidos del Metro y en los bajopuentes de la ciudad.

Otra crítica es que el proyecto es demasiado ambicioso y olvida que su propósito debe ser el rescate de la avenida Chapultepec. Un proyecto que incluyera nada más las obras y medidas de superficie lograría el propósito de recuperación de la zona a un precio mucho más bajo. Habría que incluir la ampliación y remozamiento de las aceras, la reordenación del transporte público, el ordenamiento de los cruces peatonales, la sustitución de árboles enfermos, la colocación de nuevos árboles y, sobre todo, la eliminación de los puestos del comercio informal que actualmente se encuentran sobre las aceras. Un proyecto así, sin embargo, no generaría los recursos financieros de los comercios del segundo piso y, por lo tanto, habría que cobrárselo a los contribuyentes.

Entiendo las razones políticas de abrir un proyecto como éste a una consulta pública. Pero el costo de la votación es alto -7 millones de pesos-y la verdad es que la mayoría de las personas no somos urbanistas o expertos en espacios públicos para ofrecer una opinión calificada. La experiencia nos dice que muy pocos de los habitantes de la delegación Cuauhtémoc, que somos los que tenemos derecho a votar, acudiremos realmente a las urnas.

Algunos de los argumentos que escucho en oposición al proyecto revelan que el tema es más político o dogmático que urbanístico o práctico. Una de las líderes del movimiento que promueve el "No" me dice que no se puede perder "la rectoría del Estado" sobre la avenida Chapultepec (¡!). Otros hablan de la privatización de un espacio público, aunque los comercios del segundo piso no existen y no lo harán si la iniciativa privada no los construye por lo que no hay realmente ninguna privatización. El tema parece ser más de rechazo a la iniciativa privada que al proyecto.

En general encuentro que el proyecto tiene más de positivo que de negativo. Pero lo que más correcto me parece es que el jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera, haya dicho que independientemente del resultado de la consulta, que él acatará, habrá algún proyecto para mejorar la deteriorada avenida Chapultepec.

 MITIGAR EL CAMBIO

Mancera ofreció en la COP21 dedicar el 10 por ciento del presupuesto de la ciudad de México, unos 5,200 millones de dólares al año, a mitigar el cambio climático. ¿No tendrá ya otros problemas urgentes el D.F.? Habrá que medir cuánto reduce la temperatura del planeta este gasto del dinero de los capitalinos.

Twitter: @SergioSarmiento

Leer más de EDITORIAL / Siglo plus

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de EDITORIAL

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 1175597

elsiglo.mx