En áreas 'prohibidas'. El fraccionamiento residencial San Patricio se construyó sobre terrenos que hasta entonces estaban clasificados como de uso industrial pesado. (RAMÓN SOTOMAYOR)
La falta de planeación ha sido una constante en el crecimiento de la ciudad a través de los años, y en la actualidad hay quienes siguen padeciendo las consecuencias de ello.
Ejemplo de esta situación son las colonias rodeadas de empresas de todo tipo porque se crearon justo en medio del Parque Industrial Lagunero, bajo el argumento de facilitar el traslado a los trabajadores de dichas industrias.
Fraccionamientos construidos en terrenos destinados al uso industrial y hasta asentamientos sobre el cauce de afluentes naturales, son también el reflejo de que en su momento, se privilegiaron intereses políticos o de grupo sobre la necesidad de dar un orden al crecimiento y de evitar exponer a la población a cualquier situación de riesgo.
Fue hasta la actual administración municipal cuando el área de Urbanismo se desvinculó de Obras Públicas y adquirió la figura de una Dirección, cuyo titular, Tomás Galván asegura que ya se está trabajando con paso acelerado en generar las pautas para que Gómez Palacio tenga un desarrollo adecuado y sostenible, evitando que se formen nuevas áreas de exposición o de riesgo para la ciudadanía.