Raúl Jiménez (izq) consiguió descontar para la escuadra mexicana al cobrar desde los 11 pasos, fue el único gol de México. (Fotos Jam Media)
El fracaso anunciado del Tri en la Copa América Chile 2015 llegó ayer luego de caer 2-1 con Ecuador en partido jugado en el Estadio El Teniente de esta ciudad.
Ecuador fue mejor que el cuadro azteca, tanto que desde el primer minuto puso en peligro la meta defendida por Jesús Corona.
El Tri no se hallaba en el campo, era un espejismo de aquel que enfrentó el pasado lunes a Chile, al que le jugó al tú por tú; Ayer ante los ecuatorianos salió desubicado y sin idea.
Pasados los primeros 20 minutos México tuvo la única de peligro luego de que Vuoso peleó una pelota en los linderos del área grande con la defensa ecuatoriana, la ganó y tras un drible disparó pero el balón pasó cerca de la meta rival.
Pero minutos después, al 25, Bolaños puso adelante a Ecuador luego de recibir un pase en solitario tras una mala salida mexicana y clarea a Corona.
Ecuador muy superior a México, pero sin capitalizar los embates de Bolaños, Noboa y Enner Valencia, el más activo en el juego.
NO RESISTEN EMBATES
En la segunda parte vino la debacle mexicana que, aunque mejoró un poco, no resistía los embates del rival.
Al 57 cae el segundo gol de Ecuador a través del conocido Valencia, quien queda mano a mano con Corona.
México trata de responder con más fuerza ofensiva al entrar Aquino, Marco Fabián y Eduardo Herrera, pero la ofensiva mexicana carece de idea y sus embates no generan peligro.
Sin embargo, vino el descuento al 64 con penalti cobrado por Raúl Jiménez.
Ecuador controla el juego con embates de poco peligro y México intentando empatar pero el fracaso llega con el silbatazo final.
INCUMPLE PROMESA
La promesa de Miguel Herrera en el verano fue: "Voy a llegar a la final de la Copa América y ganar la Copa Oro".
La mitad ya no se cumplió, se convirtió en un fracaso.
La Selección Mexicana quedó tronada, eliminada apenas en la fase de grupos de la Copa América 2015 al caer 2-1 con Ecuador en un partido de pesadilla, donde el conjunto tricolor simplemente no existió, al volverse burdo, sucio y vulgar.
Miller Bolaños y Enner Valencia fueron los verdugos del Tri, o mejor dicho aprovecharon los regalos del equipo mexicano, que entró desconcentrado, muerto en vida y que en ningún momento tuvo capacidad de reacción, ni futbolística ni de espíritu. El gol de Raúl Jiménez, de penalti, sólo fue consecuencia de lo poco superior que fue el rival, que mereció ganar sólo porque se lo concedió esta Selección Mexicana que hoy más que nunca se ganó el estatus de "B".
Lo que comenzó mal, terminó mal. Después del juego amistoso contra Guatemala en Chiapas, donde se ganó (3-0) pero no se convenció, la gira previa inclinó aún más el futuro. El empate ante Perú, en Lima (1-1) fue engañoso y la derrota ante un Brasil "de segunda" (2-0) puso las cosas en su lugar, que se acomodaron aún más en el torneo chileno.
No se le pudo ganar a Bolivia evidenciando falta de contundencia. Se sacó el empate ante Chile, jugando sólo un buen primer tiempo y ante Ecuador no hubo equipo, no hubo técnico.
Y todo quedó mal.