Hace cuatro años, "Salvador", de 23 años de edad, fue diagnosticado como seropositivo y desde entonces depende de sus retrovirales para no contraer una enfermedad que pueda poner en riesgo su vida.
Pero debido al desbasto de medicamentos en el Capasits Torreón, lo ha obligado a suspender su tratamiento, situación que lo llena de miedo.
En menos de dos años ha presentado dos quejas ante la Dirección de Programas de VIH/SIDA y Derechos Humanos de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos vía correo electrónico, ante el riesgo que representa el no llevar el tratamiento que su padecimiento exige.
Pese a ello, los problemas siguen,"esta no es ni la primera ni la segunda ocasión, estamos hablando de la sexta vez que yo voy y que me dicen que el medicamento no está disponible", dice Salvador.
Son dos medicamentos los que impiden que su carga viral baje y sea vulnerable a cualquier enfermedad que lo ponga en riesgo.
Comprarlos, ¡imposible! Y es que de acuerdo con Salvador, por lo menos cada medicamento tiene un costo de 5 a 6 mil pesos.
"Deben tener surtido todo el tiempo, puesto que es un medicamento que no se puede suspender; otra cosa, no soy el único usuario que lo maneja".
Debido a que el desabasto es frecuente, Salvador se prepara acudiendo antes de que su dotación termine, pero esta vez no fue suficiente, pues su medicamento termina hoy, por lo que espera no enfermar.
EN RIESGO
Obligación
El Centro Ambulatorio de Prevención y Atención en Sida e Infecciones de Transmisión Sexual (Capasits), es el encargado de atender a los pacienes y dotarlos del medicamento.
4
AñOS
Tiene Salvador tomando su medicamento para mantenerse sano.
Fotos: La i
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