Riesgos. Pemex ve poco viables los campos que le fueron dejados por la Sener.
Petróleos Mexicanos (Pemex) quiere regresar 95 campos petroleros en etapa de producción y exploración que le fueron asignados por la Secretaría de Energía (Sener) en la Ronda Cero, debido a que nunca los pidió.
Gustavo Hernández, director Operativo de Pemex Exploración y Producción (PEP), dijo que estas áreas implican un costo para la empresa, aunque no dio un monto estimado.
"Son 95 asignaciones que se le entregaron a Pemex que no solicitamos (en la Ronda Cero), y ésas, de alguna forma, tenían una producción, aunque de un volumen menor en comparación de los volúmenes importantes de los campos marinos, pero al fin y al cabo producción, y al fin y al cabo, también costo.
"No estaban en el radar de nosotros porque no estaban en la solicitud de la Ronda Cero, y lo que estamos planteando es la devolución al Estado de esos campos para que hagan con ellos lo que consideren pertinente, que es licitarlos, guardarlos o buscarnos un socio", explicó.
En caso de que Sener, la CNH y Hacienda encuentren un socio a Pemex, a través de una licitación, la empresa estatal evaluaría retener la asignación, dijo el directivo en su participación en el seminario Impacto de la Reforma Energética en Pemex, en la UNAM.
Para devolverlos, Pemex deberá hacer la rehabilitación ambiental de los mismos, ya fueron explotados por la firma antes de la Reforma Energética.
"Hay una variedad de opciones para esos campos y nosotros lo que tenemos que hacer es explotarlos en tanto no se haga la devolución formal de los 95 bloques.
"Es difícil de estimar el costo porque están distribuidos a lo largo del país. Hay campos marinos y terrestres; campos en Veracruz, en Chiapas, Tabasco, en el norte. Entonces cada uno tiene su costo y hay que revisar campo por campo", agregó.
Sobre los contratos que firmó la empresa entre 2001 y 2012 bajo las modalidades de integrales de Exploración y Producción (CIEP) y los de Obra Pública Financiada (COF), explicó que dos de ellos están en fases avanzadas de migración para que de conviertan en un contrato de producción compartida que ofrece la reforma energética de 2013.
Los dos primeros, para los campos Misión y Santuario, están esperando que la Comisión Reguladora de Energía (CRE) les autorice las tarifas de transporte de hidrocarburos para que puedan ser firmados.
Hernández explicó que antes de llegar a este punto, Pemex tuvo que negociar los términos de la asociación con sus contratistas pues ahora compartirán inversiones y riesgos cuando bajo la modalidad de CIEP y COF no corrían estos riesgos.
En esta negociación asistieron entidades financieras como Evercore y Credit Suisse entre otros.
En ambos campos, el interés económico de Pemex es superior al 50 por ciento.