Electricidad. Doña Susana dice que al fin hay luz.
"Me voy a morir y no voy a alcanzar a ver la luz ", era el pensamiento de Silvia Conteras, quien dice que después de casi 50 años en el ejido Mala Noche finalmente pudieron contar con este servicio tan elemental.
La señora platica que hace más año y medio que empezaron con informales del proyecto y se le hacía increíble, hasta que a finales de octubre del 2014 colocaron el primer poste y pasaron sólo dos meses para que finalmente pudieran tener el servicio.
Con 91 años de edad, doña Susana Cisneros, platica que aunque tarde les llegó el progreso, aunque dice "yo ya me acostumbré a vivir así, pero ahora tengo mi lavadora".
"Si no más viera lo pobre que éramos, dormíamos en jacales, andamos descalzos, a veces comíamos y a veces no, pero éramos muy felices", recuerda.
La obra tuvo un costo de 8.5 millones de pesos.