El presidente de México, Enrique Peña Nieto, dijo hoy que la "honorabilidad de las Fuerzas Armadas está por encima de cualquier sospecha o duda", en momentos en que se ha cuestionado el papel del Ejército la noche del 26 de septiembre pasado en Iguala, cuando desaparecieron 43 estudiantes de magisterio.
"Como instituciones al servicio de México, la honorabilidad de nuestras Fuerzas Armadas está por encima de cualquier sospecha o duda", señaló Peña Nieto durante la celebración del día del Ejército en el Campo Militar Marte de la capital mexicana.
Durante la celebración, en la que fue inaugurado un monumento en homenaje al Ejército mexicano, el secretario de Defensa, Salvador Cienfuegos, dijo que "en ocasiones se ha señalado al Ejército sin tener pruebas".
"Existen situaciones sensibles que han despertado el sentir y pensar de la sociedad, las Fuerzas Armadas no han quedado exentas de dichas reflexiones. En ocasiones se nos ha señalado sin agotar los cauces legales para tratar de desprestigiarnos y dañar la confianza en nosotros depositada", indicó.
Cienfuegos señaló que las Fuerzas Armadas siempre serán las más interesadas "en que cualquier incidente que involucre la participación de personal militar sea investigado a fondo y se esclarezca plenamente".
También dijo que "deben ser las autoridades judiciales competentes las que determinen las responsabilidades que conforme a derecho correspondan" a los integrantes de las Fuerzas Armadas.
El año pasado el Ejército se vio implicado en el asesinato de varios presuntos delincuentes en el municipio de Tlatlaya, en el céntrico Estado de México, el 30 de junio de 2014.
Según la Fiscalía, ese día 14 civiles murieron en un enfrentamiento con militares y ocho fueron asesinados por los soldados después de haberse rendido, aunque la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) aseguró que fueron 15 las ejecuciones extrajudiciales.
Siete militares son procesados por estos hechos. Todos por ejercicio indebido de servicio público, tres de ellos además por abuso de autoridad, homicidio calificado, alteración ilícita del lugar donde ocurrieron los hechos y un oficial por encubrimiento.
Además, el Ejército ha sido fuertemente cuestionado por familiares de los 43 estudiantes que desaparecieron el 26 de septiembre pasado en Iguala, en el sureño estado de Guerrero, por no haber ayudado a los jóvenes cuando eran atacados a tiros por policías locales.
Los familiares de las víctimas reclaman al Gobierno que investigue el papel de las Fuerzas Armadas en los hechos violentos del 26 de septiembre, en los que también murieron seis personas y otras 25 resultaron heridas.
El Gobierno ha insistido en que las fuerzas federales no participaron en los hechos, pero hace varias semanas aceptó abrir los cuarteles para que los familiares busquen a los estudiantes desaparecidos.
Según la investigación oficial, los 43 jóvenes fueron detenidos por policías y entregados a miembros del cártel de Guerreros Unidos, quienes presuntamente los asesinaron e incineraron en un basurero al creer que pertenecían al grupo antagónico Los Rojos, una versión en la que no creen los familiares.
Peña Nieto encabezó la celebración del día del Ejército en el Campo Militar Marte de la capital mexicana. (Notimex)
