Acusaciones. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro en un discurso ante la ONU.
Una corte de Manhattan acusó a dos sobrinos de la primera dama venezolana Cilia Flores de confabularse para introducir 800 kilogramos de cocaína a Estados Unidos y ordenó que permanezcan detenidos sin derecho a fianza.
Un tribunal federal presentó los cargos contra Efraín Campos y Francisco Flores por participar en reuniones en Venezuela para analizar el envío de un embarque de cocaína a Estados Unidos a través de Honduras.
Ambos acusados comparecieron ante la corte neoyorquina, donde se les ordenó permanecer detenidos sin derecho a fianza. No emitieron ninguna declaración formal. La próxima audiencia se programó para el 18 de noviembre.
El caso de los jóvenes podría exacerbar las ya de por sí tensas relaciones entre Estados Unidos y Venezuela, al tiempo que refuerza las acusaciones estadounidenses de narcotráfico en los más altos niveles del gobierno del presidente venezolano Nicolás Maduro.
Sin hacer mención al caso, Maduro dijo la madrugada del jueves en Twitter que "la patria seguirá su camino, ni ataques, ni emboscadas imperiales podrán con el pueblo de los libertadores, tenemos un solo destino...Vencer".
La detención se produjo tres semanas antes de las elecciones legislativas en Venezuela en las que según los sondeos la oposición podría asestar al partido en el gobierno su peor derrota en 16 años, en medio de una inflación de tres dígitos y una escasez generalizada de productos.
"El momento no es exactamente ideal", comentó Michael Shifter, presidente del grupo de estudios Inter-American Dialogue, con sede en Washington, en un correo electrónico tras conocerse la noticia sobre las detenciones.
"Los arrestos podrían dar a Maduro la excusa que necesitaba para declarar el estado de emergencia y posponer las elecciones. Atribuirá los arrestos al imperialismo estadounidense y los verá como un intento de socavar su gobierno", agregó.
El influyente presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, no hizo referencia directa a la detención de los sobrinos de Flores, pero advirtió que Washington intenta desestabilizar al gobierno de Maduro.
El ministerio venezolano de Comunicaciones y la Cancillería declinaron hacer comentarios bajo el argumento de que no tenían información al respecto. Maduro no hizo mención alguna y Flores publicó dos mensajes y varias fotografías en su cuenta de Twitter en los que no hizo referencia al tema y sólo destacó la participación de su esposo en la sede de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra.
Campos y Flores fueron detenidos el martes y trasladados a Estados Unidos. Los hombres fueron arrestados en la capital haitiana Puerto Príncipe tras llegar de Venezuela en un avión privado, dijo Michael Vigil, exdirector de operaciones internacionales de la DEA que fue informado por las autoridades estadounidenses sobre la operación encubierta. Ambos portaban pasaportes diplomáticos, pero carecían de inmunidad diplomática, señaló.
El secretario ejecutivo de la coalición opositora venezolana, Jesús Torrealba, solicitó ayer jueves a la Asamblea Nacional la apertura de una "investigación inmediata" que dé respuesta al país sobre la detención de los dos jóvenes vinculados a la pareja presidencial.
Arrancan campañas legislativas
Venezuela arranca hoy viernes, la campaña electoral más reñida de su historia para unas elecciones legislativas, en las que la oposición espera superar en puestos en la Asamblea Nacional (AN) al chavismo, que desde hace casi 15 años tiene la mayoría de sus 167 diputados.
Los venezolanos escogerán 113 diputados de forma nominal, otros 51 serán elegidos por lista de partido y otros tres en representación de las comunidades indígenas.
En los comicios están llamados a participar 19 millones de electores. Los dos principales contendientes son el gobernante Partido Socialista Unido (PSUV) y sus 31 partidos aliados, que integran conjuntamente el Gran Polo Patriótico (GPP), y la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), compuesta por una veintena de organizaciones.
La oposición pone su esperanza en estas elecciones confiada en varios estudios de opinión publicados en los últimos meses que le dan un margen de victoria holgado debido fundamentalmente a la crisis económica que atraviesa el país.
Acusaciones
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, arremetió ayer contra funcionarios que trabajan en Naciones Unidas y esbozó acusaciones sobre complicidad de algunos de ellos con opositores a su gobierno y disidentes políticos.
Según Maduro, los responsables del golpe de Estado orquestado contra el entonces presidente Hugo Chávez en abril de 2002 “son los mismos” que ocasionaron las manifestaciones n contra del régimen en 2014.
“Son los mismos (...) Son los que cuentan con todo el apoyo financiero, mediático, y que cuentan con algunas estructuras del sistema internacional de Naciones Unidas para avalar la violencia descarada”, dijo Maduro ante el Consejo de DH de la ONU.
Se busca ejercer “una especie de impunidad internacional para derrocar gobiernos legítimos como el que yo presido”, acusó. Madu-
ro criticó a “los funcionarios” de la ONU, sin precisar quiénes, lo que puede incluir desde el Alto Comisionado hasta portavoces, relatores, expertos entre otros.