La diócesis de Saltillo, a cargo de Raúl Vera López, pidió al gobernador Rubén Moreira que intervenga y detenga la violencia registrada en el ejido Gabino Vázquez a causa de la pelea de tierras.
En una carta firmada por la diócesis de Saltillo y el párroco de la Iglesia San José en Cuatro Ciénagas, Martín Rodolfo Hernández Linares, pidió a Rubén Moreira que intervenga y castigue a quienes participaron en la destrucción del ejido el pasado 4 de noviembre.
La diócesis lamenta que el Gobierno del Estado se refiera a estos hechos como un "asunto entre particulares" al considerar que con ello han minimizado los actos delictivos.
"Hace cinco años fuimos testigos de las amenazas que los mismos ejidatarios sufrieron, a manos de otros pistoleros que encañonaron a hombres, mujeres y niños. En aquel entonces todo quedó en un susto", indica el párroco . "Hoy las cosas son peores. Como usted y las autoridades civiles y agrarias saben, la situación que se vive en el ejido Gabino Vázquez es compleja y no es nueva. Nos preocupa en el transcurso de por lo menos diez años, ninguna autoridad haya tenido la voluntad política para tratar de resolverlo".
De acuerdo a los ejidatarios el pasado 4 de noviembre entre las 13:00 y las 19:00 horas, varios hombres a bordo de dos camionetas, seguidos de un tráiler que transportaba una máquina de tipo Bulldozer, irrumpieron en el ejido y destruyeron la Capilla, Casa del Médico y algunas casas.