Interior de las Fábricas de Francia en 1900, aparece el Sr. Pinoncelly y sus hijas.
Don Eugene Pinoncelly y las Fábricas de Francia
En las tres últimas décadas del siglo XIX, la Villa de Lerdo de Tejada fue su período de auge y de progreso, pues a partir de 1870 se intensifica la instalación del comercio y llegan los hombres emprendedores y capitalistas. En este tiempo la Villa Lerdo de Tejada, era el paraíso soñado de los inversionistas extranjeros, por la gran confianza y seguridad que invadía a la región, dada a su gran pujanza agrícola y económica. Así es como en poco tiempo después aparece el caballo de acero en 1883, o sea, el Tren denominado Ferrocarril Central Mexicano, e instala su primera estación en esta Región, a la cual se le denominó Lerdo. Gracias a la gente de este terruño se construyó un pueblo con terrenos donados por el hacendado Santiago Lavín Cuadra, correspondientes a la finca de la Hacienda de Santa Rosa.
Eugene Pinoncelly nació en Jausiers, Francia en 1862 y era hijo único, al morir su mamá en Francia don Eugene decide venir a México, dejando a sus primos hermanos, que después sus descendientes de éstos se trasladan a América, pero a los Estados Unidos directamente a Nueva Orleans. Don Eugene muy joven llega a la Villa de Lerdo, antes de llegar a la Villa estuvo en la ciudad de México y alguien le recomendó a este lugar lagunero.
Gracias a ese instrumento del progreso llegaron muchísimas personas a la Región de diferentes partes del país y del extranjero, y entre ellas un francés llamado Eugene Pinoncelly. Los franceses son reconocidos por su tesón y emprendedores en el trabajo, muchos de ellos habían llegado a México, Éstos siempre se apoyaban mucho entre ellos, más si era hombre joven, empleado de tienda. Trabajaban duro y la mayor parte de lo que ganaban, lo ahorraban hasta tener lo suficiente para independizarse para poner un comercio. Es así como los patrones y los demás paisanos localizados en México, les daban crédito a los nuevos iniciadores de las nuevas empresas comerciales, con lo cual se iba formando una especie de cadena en la cual todos iban ganando y se seguían apoyando como familia.
Fue así que don Eugene muy joven empezó con un negocio propio y se instala en la Villa de Lerdo en 1877 en la esquina de la hoy calle Madero y esquina de Hidalgo, (Antes Calle de la Reforma No. 146, esquina de la plaza principal, frente al hotel Madrid) poniendo a funcionar una de las tiendas que dieron prestigio a Lerdo con el nombre de las Fábricas de Francia, que dentro de su publicidad la presentaba como Gran cajón de Ropa. "Efectos de lujo, nacionales y extranjeros, calzado fino, adornos, sedería y confecciones para señoras". Este nombre de la tienda Fábricas de Francia era muy utilizado en todo México por los franceses que tenían este tipo de establecimientos en varias partes de la república.
Una vez que don Eugene Pinoncelly logró que su negocio de ropa progresara, él se casa muy joven con Antonia Hernández, quien nació en 1872 e hija mayor de Juan Hernández Arrieta. La boda se realizó en la ya Ciudad Lerdo. En el transcurso del matrimonio tuvieron tres hijas que nacieron en Lerdo, como fue María, en el año de 1896, Dora, en 1897 y Antonia en 1899. Al nacer la última de las niñas, desafortunadamente la esposa de don Eugene fallece.
Juan Hernández Arrieta, nació en Durango Dgo, y se ignora cuándo se vino a radicar a Lerdo, pero se aclara de que no es familiar de los generales Arrieta, quienes participaron en la Revolución Mexicana, cuya familia de ellos era de Canelas, Dgo. fue Juez Civil a fines del siglo XIX e inicios del 20 en la Villa y después en Ciudad Lerdo. El Sr. Hernández era muy conocido por la comunidad lerdense, participaba en las actividades comunales, en una de ellas tomó parte en la solicitud que hicieran las fuerzas vivas de la Villa, al gobernador de Durango, Juan Manuel Flores la elevación de la Villa Lerdo de Tejada a Ciudad, encabezando la petición formada por 1,141 ciudadanos de fecha el 1º. de agosto de 1894.
En el análisis del personaje de don Eugene Pinoncelly, salió a colación en la historia lerdense, otro gran ciudadano don Luis Araujo Campa, que echó raíces familiares en Ciudad Lerdo, Dgo., fue empleado en la tienda Las Fábricas de Francia, así lo describe en una parte de la crónica familiar que escribió su hija Doña Aurora Araujo Story en su "Síntesis de mis antepasados". Luis Araujo Campa, nació en Durango el 21 de octubre de 1875 y a la edad de 11 años se salió de la casa viniéndose en un tren de trampa de Durango a Torreón y de allí como pudo llegó a Lerdo, pidió un trabajo como mozo de limpieza a Don Eugene Pinoncelly, dueño de la tienda Fábricas de Francia, quien lo adoptó como a un hijo. Luis creció a su lado y se hizo un hombre de provecho. Al transcurrir el tiempo Luis pasó a ser dependiente mayor.
Luis Araujo el 22 de noviembre de 1904, se casa con Sara Navarro Meza, hija del legendario patriarca de la Villa de Lerdo don Catarino Navarro Urías y de Narcisa Meza. Sara tenía 18 años y Luis 29, siendo padrino de boda don Eugene Pinoncelly. Ya en ese tiempo don Luis administraba el negocio del almacén de ropa, el cual ya había logrado una gran experiencia, razón por lo cual el francés ofreció traspasarle la tienda de las Fábricas de Francia, diciéndole que al quedarse ya sin su ayuda, lo mejor era regresar a su Patria. Posteriormente pocos años después en 1908 muere el Sr. Pinoncelly, las niñas todavía chicas quedan huérfanas, por lo que los abuelos y tíos maternos se hicieron cargo de ellas.
De acuerdo con informaciones del Sr. Sr. David Roberto Domínguez bisnieto del Sr. Pinoncelly, manifiesta que su bisabuelo fue accionista de la compañía del Ferrocarril Eléctrico de Lerdo a Torreón, sin embargo, después rectificó con otro dato que le proporcionó su mamá; decía que su bisabuelo no era accionista del tranvía, lo que sucede es que al morir el Sr. Pinocelly en 1908, las albaceas que tenían el encargo de ver por las niñas, con parte del dinero que heredó compraron acciones del tranvía a nombre de ellas. En lo que respecta a las Fábricas de Francia de don Eugene Pinoncelly, antes de morir en 1908, la tienda pierde su nombre, por lo que se deduce que el dueño de las Fábricas de Francia de Lerdo, antes de fallecer haya vendido sus acciones a nuevos inversionistas, pues la tienda aparece en Torreón en el año de 1905, con el nombre de la "Ciudad de París".
Respecto al cambio, la causa fue una mala aplicación de la política tributaria de los altos impuestos cargados por el Gobierno del Estado de Durango a los empresarios, que iniciaron desde 1890 en trasladar sus negocios a Gómez Palacio y a la entonces Villa del Torreón: Primero por el establecimiento de la Estación del Ferrocarril Central y luego la del Ferrocarril Internacional, las principales casas comerciales y hoteleras tomaron la decisión de irse a esos lugares, recrudeciéndose ese problema en 1905 cuando la Ley Territorial del Estado de Durango, divide al municipio de Lerdo, tomando parte de su territorio para crear el municipio de Gómez Palacio, razón por la cual para ese entonces aparte de las Fábricas de Francia, le siguió la tienda de capital extranjero Goodman y Echmidt y/o La Novedad, que se convirtió en El Puerto de Liverpool y otras más.