Mejoras. El Centro de Día Jesús Torres recibirá donativos por parte de la Cruz Roja Internacional, anunció el padre Luis Valdez.
Las mejoras en el Centro de Día Jesús Torres, continúan. Ahora es la Cruz Roja Internacional quien donará artículos para que las condiciones de los visitantes sean más cómodas.
Luis Valdez, párroco de la iglesia de San Judas Tadeo en Torreón y presidente de la Red Parroquial de Migrantes, informó que la Cruz Roja Internacional donará calentadores solares, así como filtros de agua y pintura, para dar color a las instalaciones, que hace algunos meses fueron ampliadas.
El anuncio se hizo hace más de diez días, luego de que la Casa del Migrante o centro de día, ubicada en la colonia Las Julietas, cumpliera una serie de condiciones que exige la benemérita institución a nivel internacional. "No nos han dicho el monto más bien ellos nos ayudan en especie.
Nos acaban de avisar de la confirmación del donativo. Vinieron de la Cruz Roja conocieron el centro y nos informaron que nosotros estábamos dentro de sus proyectos, entonces no nos ofrecieron dinero, sino instalar los calentadores, filtros y pintura", explicó el sacerdote Jesuita.
Fue a finales del mes de agosto que la obra de ampliación en la conocida Casa del Migrante terminó. La construcción fue financiada gracias a la donación que recibió la Universidad Iberoamericana unidad Torreón por un monto cercano a los 560 mil pesos por parte de una fundación europea. Dicha cantidad fue entregada a la Asociación Desarrollo Comunitario Integral, antes La Laguna por los Migrantes, responsable de la operación del Centro ubicado en la colonia Las Julietas.
En esta segunda etapa, se construyó un área común, se amplió el comedor y se construyeron dos áreas de descanso, una para hombres con capacidad para ocho personas, y una para mujeres, con una capacidad de cuatro viajantes, cada una con sanitarios y regaderas.
En el área de uso común se construyó una gran palapa, como las que se encuentran en Honduras, dice el padre Luis, condición que les da a los visitantes, una sensación de estar en casa. Y es que la mayoría de los migrantes que están de paso por la ciudad en busca del llamado "sueño americano", son originarios de aquel país sudamericano. "Tenemos una palapa para que recuerden Honduras sobre todo porque en Centroamérica hay muchas palapas", comentó el sacerdote.
En esta temporada, el párroco pide a los laguneros acoger a los cientos de migrantes que llegan a Torreón para dar "un respiro" y continuar con su camino rumbo a los Estados Unidos. "La invitación es que sigamos con esta actitud de solidaridad hacia los migrantes que están de paso y en situación de dificultad".
El siglo de torreón / Guadalupe Miranda
