Enojo. Los manifestantes tomaron la alcaldía municipal el 23 de febrero.
A casi dos meses de haber tomado la presidencia municipal de San Buenaventura los ciudadanos no han recibido respuesta a sus peticiones ni en su exigencia de la renuncia del alcalde Óscar Flores Lugo, lo que mantiene en tensión a la población de la región centro que teme que en cualquier momento se vuelva a bloquear la carretera 30.