Cultura Cultura columnas editorial

El Quijote, 400 años

EL QUIJOTE DE CLEMENCÍN

Juan A. García Villa

Desde 1987 (casi) cada año se celebra en la ciudad de Guanajuato el Coloquio Cervantino Internacional. En este 2015 se llevó a cabo la edición número 25. Se trata de un acontecimiento cultural de muy altos vuelos, en el cual participan los más reconocidos cervantistas de México y del mundo. De cada Coloquio se edita una Memoria con todas las ponencias presentadas.

En la Memoria correspondiente al Coloquio de 1996, me llamó la atención un fragmento de la presentación hecha por el Profr. Rubén Carrillo Ruiz, de la Universidad de Colima, donde dice:

"Hace diez años, deambulando por las calles céntricas de Colima, divisé en cierta esquina unos montones de cajas, con plena disposición para que el servicio nocturno de recolección de basura les dictaminara su natural destino… Vi algunas páginas de periódicos y volúmenes cuyos títulos la luz mortecina me impidió leer. Nunca supe de dónde procedían".

Luego agrega: "Al día siguiente hojeé los libros: vi unos de color rojo con la siguiente leyenda: Biblioteca Clásica, El Ingenioso Hidalgo don Quijote de la Mancha… comentado por D. Diego Clemecín. Librería de la viuda de Bernando (sic, por Hernando) y CA., calle del Arenal núm. 1, 1894". Y a continuación comenta: "Empecé a contarlos, eran siete (tomos) casi todos en buenas condiciones. En total, los siete volúmenes suman unas cuatro mil páginas, de las que poco más de dos mil corresponden al comentario crítico de Diego Clemencín, Son observaciones puntuales, de gran erudición, (obra a) la que Alfonso Reyes recomendaba no tenerle miedo".

Hasta aquí la anécdota. Efectivamente el comentario crítico a El Quijote hecho por Clemencín, si bien objeto de numerosas y apasionadas controversias, es de gran valor por su erudición. Aquí he escrito en varias ocasiones que es uno de los dos mejores que hay. Ningún cervantista que se precie puede dejar de leerlo.

La edición a la que aquí se hace referencia, de 1894, no es de siete sino de ocho volúmenes y no comprende cuatro mil páginas sino exactamente tres mil veinticuatro, con el total de las 5 mil 554 notas de Clemencín. Fue este ministro de Colonias de Fernando VII y presidente de las Cortes españolas antes de caer en desgracia política, lo que le permitió dedicarse de lleno en su Hacienda de Fuen Fría durante los últimos diez años de su vida al estudio de El Quijote.

De la primera edición, integrada por seis volúmenes, cuya publicación se inició en 1833, Clemencín alcanzó a ver impresos sólo los tres primeros, pues murió en 1834. Entre este último año y 1839 sus hijos publicaron los tres restantes. Y la segunda edición apareció hasta seis décadas después, en 1894, que es precisamente la que halló tirada en la calle el Profr. Carrillo Ruiz, cuando la primera era "ya inconseguible".

Posteriormente ha tenido cuatro ediciones más, con un total de seis impresiones, la última en 1991, de manera que, como se comprenderá, la obra de Clemencín continúa tan agotada como hace más de un siglo, pues desafortunadamente sólo ha tenido ocho tirajes en 180 años. Hay, es cierto, un buen número de ediciones de El Quijote que contiene notas de Clemencín, pero no las 5,554 sino sólo una selección de éstas.

En librerías de lance de la Ciudad de México adquirí en 2007 los 8 tomos de la edición de 1894, por 3 mil 400 pesos, y en 2010 una mejor edición, de las seis que ha habido, publicada en Argentina en 1953 en 4 tomos, por sólo 450 pesos, que fue la que leí.

Jagarciav@yahoo.com.mx

Juan A. García Villa

Leer más de Cultura

Escrito en: El Quijote Miguel de Cervantes Saavedra

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Cultura

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 1174622

elsiglo.mx