En los años de 1940, 50 y 60, un acontecimiento social de buen nivel era el Baile de Coronación de la Reina de los Festejos del Instituto "18 de Marzo" de Gómez Palacio.
Dichos festejos se celebraban anualmente en el mes de mayo, lo cual es correcto, pues se fundó precisamente en mayo de 1940, aunque inició actividades en el mes de septiembre de ese año, cuando comienza el curso escolar. Posteriormente su celebración fue en el mes de marzo, indebidamente según considero, pues 18 de Marzo es su nombre o santo, más no su nacimiento.
El tema de este Enfoque es reseñar el Baile de Coronación que se convertía en un evento en el que participaban todos los sectores sociales de la Ciudad. Autoridades municipales, directivos del plantel, maestros, padres de familia, desde luego estudiantes de todos los niveles y muchos exalumnos, sobre todo los que estudiaban ya carrera profesional fuera de la región. Era una auténtica y alegre fiesta estudiantil, en la que, paralelamente, se llevaban a cabo eventos deportivos, actividades culturales y concursos académicos.
La coronación de la reina estaba a cargo del propio gobernador del Estado o de su representante. A esta ceremonia enviaban embajadoras distintas instituciones educativas y culturales, así como clubes de servicio de Gómez Palacio, Lerdo, Torreón y Durango. Así de importante era el evento, pues además el gobierno del Estado apoyaba al Instituto, enviando cada año, desde la Ciudad de Durango y pagándola a una buena Orquesta, la de Nuco Cisneros, para amenizar el baile, que se realizaba en las canchas y jardines del Instituto. La conducción del programa de coronación la llevaba el apreciado Profesor Luis L. Vargas, magnífico maestro de ceremonias que le daba amenidad y sabor al acto, quien fue un fuerte impulsor del deporte, especialmente el basketbol y quien en 1961 ó 62 montó un gran espectáculo que llevó fuera de la Ciudad, principalmente a la Ciudad de Durango: La Evolución del Baile, que le valió aplausos y reconocimientos, tema del que hablaremos en otro Enfoque, si El Siglo nos lo permite.
Además, el discurso de salutación a la reina era pronunciado por destacados oradores de Durango capital, invitados por la dirección del Plantel, como fue el caso de Agustín Ruiz Soto y Gustavo Domínguez Sánchez, quienes se trasladaban a Gómez Palacio para cumplir con este propósito. Pero también elocuentes exponentes del propio Instituto, saludaban a la reina en la ceremonia de su coronación.
El concurso para elegir a la reina era otro evento en que se involucraba la sociedad. Se postulaba a las alumnas más guapas, simpáticas o aplicadas, y el cómputo final era muy emocionante, eligiéndose a la reina y su princesa.
Es oportuno mencionar aquí a algunas de estas representantes de la belleza y simpatía estudiantil, al menos de las que tenemos memoria, sin que en su mención se siga un riguroso orden cronológico, lo que podrá justificarse, si se toma en cuenta que no se trata de un estudio histórico, sino sólo de una simple remembranza. Recuerdo a: Alma Sánchez Castellanos, Beatriz Zamudio, Leonor Cavanzón, Blanca Cecilia García, Eneví Contreras, Nena González, Blanca Olvera, Olga Agüero, Bety Galindo, Nora Abedrop, Alejandrina Vázquez, Bety Mijares, Nena Contreras, entre otras, a quienes saludo con afecto y respeto, donde sea que se encuentren…
Addendum.- Los concursos municipales de oratoria, reseñados en el ENFOQUE anterior, se prolongaron a los períodos de los presidentes municipales don Jesús María Pámanes Guerrero (1959 - 1962) y don Ramón González Martínez (196 - 1965), incluso en la administración de don José Rebollo Acosta (1965- 1968). Vale.
r_munozdeleon@yahoo.com.mx