Deterioro. Lápidas del panteón Serna presentan severas afectaciones.
El cempasúchil, las gladiolas, crisantemos, la mano de león, entre otra variedad de flores que tradicionalmente forman parte de esta festividad, adornaron los panteones de la Comarca Lagunera que de nueva cuenta ayer se llenaron de colores y vida.
Entre lágrimas, risas, música y comida, los laguneros recordaron a los que ya no están, pero que tienen el permiso de volver este día, según dicta la tradición.
Ahí entre la gente destaca un grupo que toca música vallenata. "Los caminos de la vida" entonan mientras una mujer adorna una tumba. Se trata de Estela Pérez, quien acudió al área restringida del panteón Jardines del Carmen a visitar a su hijo Raymundo Nava. Él falleció cuando tenía apenas 24 años de edad y su música favorita era la vallenata.
"Era muy juguetón cariñoso, jugaba mucho con su niña, lo extraño mucho, todos los días, todo el año pienso mucho en él".
Sin embargo, no todo fue recuerdo. Alicia Herrera limpiaba la tumba de su padre que ya presentaba serios estragos.
"Viene uno este día y qué es lo que encuentra, las lápidas todas destrozadas y no hay ninguna seguridad, el día que viene uno es cuando hay bastante gente porque es un nido de malvivientes", dice.
Se trata del panteón Serna el que presenta afectaciones. Herrera dice que lo peor es la indiferencia de dueños y autoridades.
Saldo blanco
La Direcció de Protección Civil no reportó incidentes durante la visita a los panteones de Torreón, este fin de semana, por la celebración del Día de Muertos.