Arsene Wenger, entrenador del Arsenal. (AP)
El Arsenal protagonizó ayer un nuevo fiasco en la Liga de Campeones, esta vez en la primera jornada de la fase de grupos, con una derrota frente al Dínamo Zagreb (2-1), el equipo sobre el papel más débil del cuarteto y reencontrado con el triunfo en esta fase de la competición dieciséis años después.
Primero se adelantó en el marcador con un gol de Josip Pivaric, en el minuto 24, para encarrilar el camino hacia la victoria.
Manuel Fernández metió el 2-0 en el minuto 55, para condenar al conjunto inglés a una derrota inesperada, por mucho que Theo Walcott diera emoción con el 2-1 al 79.