Stephen Curry anotó 28 puntos y sólo pudo concretar 2 de los 8 triples que intentó. (AP)
Los Warriors de Golden State sufrieron ayer su primera derrota de la temporada, luego de comenzar con una foja de 24-0 que impuso un récord de la NBA.
Greg Monroe anotó 28 puntos y los Bucks de Milwaukee doblegaron 108-95 a los Warriors, campeones vigentes de la NBA, que además habían hilvanado una seguidilla de 28 triunfos, contando los últimos cuatro partidos de la temporada regular.
"Esta noche no lo logramos", dijo el entrenador interino de los Warriors, Luke Walton. "Por eso es tan difícil lograr lo que estos jugadores han conseguido. La derrota nos alcanzó".
Así, la mayor racha de victorias seguidas en campaña regular en la historia sigue en poder de los Lakers de Los Ángeles, que hilaron 33 en 1971-72. Curiosamente, aquella seguidilla fue rota también por Milwaukee.
Golden State, ahora con foja de 24-1, promedia 13 triples por encuentro, pero ayer atinó apenas seis de 26 intentos.
Durante buena parte de la noche, los Warriors estuvieron en desventaja por al menos 10 puntos. Se acercaron a uno solo en un par de ocasiones.
"Bueno, sabíamos que la racha iba a terminar en algún momento", publicó Golden State en su cuenta de Twitter.
Quizás el cansancio incidió en la derrota. Los Warriors debieron disputar el viernes dos prórrogas para imponerse en Boston. Stephen Curry totalizó 18 unidades, al acertar 10 de 21 disparos de campo, incluidos dos de ocho triples.
No fue un desempeño suficiente para superar a unos Bucks que apostaron a un buen desempeño colectivo. Cada vez que Golden State se acercó, Milwaukee encontró una respuesta.
"Se hablaba mucho de la racha, pero lo más importante es que ellos son los campeones", destacó el entrenador de los Bucks, Jason Kidd. "Y entonces, nosotros no hablamos de la racha, sino de que íbamos a jugar contra los campeones".
Monroe embocó 11 de sus 16 tiros, incluida una jugada de tres puntos a 2:51 minutos del final, que amplió la diferencia a 12 unidades.
"Nunca flaqueamos", comentó Monroe.
Michael Carter-Williams coronó de manera magistral la proeza. Se enfiló por el callejón y realizó una clavada con 42 segundos por disputarse.
"Mostramos algunas buenas rachas en busca de volver al partido. Los frenamos en ocasiones", rescató Curry. "Pero durante 48 minutos, no creo que nadie pueda decir que jugamos bien".
Los seguidores de los Bucks, que llenaron el graderío del Bradley Center, celebraron ruidosamente en cuanto sonó la bocina que puso fin al encuentro. Algunos llevaban camisetas que tenían impresa la foja profética, "24-1".
Giannis Antetokounmpo finalizó con 11 puntos, 12 rebotes y 10 asistencias, en tanto que Carter-Williams contabilizó 17 puntos como reservista.
HUMILLAN A LOS LAKERS
James Harden anotó 30 puntos y los Rockets de Houston lograron ayer una fácil victoria por 126-97 sobre los Lakers de Los Angeles, que continúan en un pésimo momento.
Con una canasta de tres puntos a siete minutos del final, Nick Young acercó a los Lakers a 11 puntos, pero Houston amplió su ventaja a 115-93 con una ofensiva de 13-2 para llevarse el triunfo.
Donatas Motiejunas, Harden y Patrick Beverley coronaron ese periodo decisivo con un triple cada uno.
Motiejunas consiguió 11 tantos en su mejor actuación desde su regreso tras una cirugía en la espalda.
Kobe Bryant logró 25 puntos, siete rebotes y seis asistencias para los Lakers, que han sufrido seis descalabros consecutivos y han perdido 13 de 14 encuentros.
Por los Lakers, Marcelo Huertas jugó 17:06 minutos en los que logró cuatro asistencias sin conseguir un solo enceste.
