Apatía social
Hoy por hoy existe en nuestra sociedad cierto retroceso y pereza hacia la clase política, social y la vida en torno. Las causas de esta desidia las instituciones pierdan credibilidad.
La corrupción, las políticas restrictivas, la falta de cercanía al ciudadano, las promesas incumplidas, la incompetencia, la falta de empleos y oportunidades para tod@s y la baja formación de l@s polític@s. Una larga lista de causas que hacen que l@s ciudadan@s se aíslen de la política lo cual supone un peligro para el ejercicio de la democracia.
Si l@s ciudadan@s pierden el interés por la política se corre el peligro de que a las instituciones lleguen políticos que tampoco se preocupan por l@s ciudadan@s y estos no prestan atención y tampoco se interesaran por los asuntos de la vida pública social. La sociedad actual coahuilense vive en la indiferencia con una mentalidad conformista y pasiva con lo cual se carece de una cultura de convivencia democrática y ciudadana.
L@s coahuilens@s pretenden vivir felices en burbuja individual evadiéndose del mundo politicosocial que les rodea y esto hace que no profundicen ni reflexionen sobre los hechos y la información que reciben. L@s ciudadan@s apátic@s eligen el camino más cómodo porque no se molestan en informarse sobre lo que les rodea y no se preocupan por formar un criterio, una ética y una conciencia. L@s coahuilens@s nos encontramos en una sociedad pasiva, conformista, incrédula, inconmovible y absorta. En los últimos años se han hecho públicas informaciones que han trastornado la estructura y los pilares de nuestro sistema tanto político como económico y social. Pero parece que tantas revelaciones sobre casos de corrupción, robos e infracciones de leyes por parte de los políticos y l@s servidor@s públic@s ya no causan reacción ninguna en la opinión pública.
Como ejemplo tenemos las informaciones de quienes son l@s culpables de la megadeuda, los incumplimientos de campaña por titular del estado Rubén Ignacio Moreira Valdez La falsificación de documentos y aprobación por diputados locales. El fraude de la plaza mayor, los aumentos de impuestos sin bases claras y firmes, los servicios públicos municipales son un desastre, alza de impuestos alcantarillado, áreas verdes, calles con baches, drenaje público, alumbrado público, los tránsitos y policías inhumanos y corruptos, servicio de transporte de lo peor pero a nadie parece importarle.
Esta apatía social proviene de la evolución de la sociedad por medio de la psicología que maneja el gobierno federal, estatal y municipal que ha configurado determinado estado mental en la población. El estado de apatía en el que nos vemos sumergid@s está relacionado al sometimiento ciudadano digerido y olvidado y la mente se prepara para una nueva noticia que remplace la anterior sin provocar respuesta en el ciudadan@.
Debemos cambiar esta situación y es que hemos visto que a lo largo de la historia la participación de los ciudadanos ha sido el motor para encauzar cambios políticos, sociales, económicos y culturales. No debemos permitir que decidan por nosotros tenemos que dejar de lado la apatía y la indiferencia por medio de la información, la educación y la participación solo así podremos cambiar nuestra fatídica situación en Coahuila.
En caso contrario nuestra sociedad corre un grave riesgo de que Coahuila no sea destruido por aquellos que hacen el mal sino por aquellos que los miran sin hacer nada. Respetuosamente.
Alberto Lara Noriega
Torreón, Coahuila