Andy Murray celebra el triunfo ante Tomic. (EFE)
Gran Bretaña y Bélgica aseguraron triunfos ayer por 3-2 en las semifinales, y chocarán en una repetición de su final de hace 111 años, la última vez que el equipo belga avanzó a esta instancia. En aquella ocasión Gran Bretaña ganó 5-0 y volverá a ser favorito en noviembre gracias a Andy Murray, quien superó a Bernard Tomic en el primero de los duelos dominicales de singles, dándole a su país una ventaja irreversible.
Murray ganó los tres puntos de su equipo en Glasgow, Escocia, al dominar sus dos partidos de singles y hacer dupla con su hermano Jamie para imponerse en cinco sets en los dobles del sábado.
Steve Darcis dio el boleto a Bélgica al imponerse al argentino Federico Delbonis en el quinto y decisivo partido de la otra semifinal, disputada en Bruselas.
Gran Bretaña avanzó a su primera final en 37 años gracias a que Murray se repuso de dolencias en la espalda para vencer a Tomic por 7-5, 6-3, 6-2.