ENTRADA.- En algunas redes sociales vino circulando estos últimos días, una especie de campaña masiva tendiente a desalentar a los mexicanos para que celebraran las fiestas de la independencia, especialmente el "Grito", que por más de doscientos años se ha venido conmemorando en los todas las plazas de nuestras ciudades. El mensaje transmitido por las redes tendía a denigrar en su conjunto a todas las autoridades de manera indiscriminada y a denigrarnos también a nosotros mismos como mexicanos.
SOPA.- Este México es el único país que tenemos, no tenemos otro. Esta patria es el producto y resultado de nuestros propios actos. Es el resultado de las acciones que en conjunto hemos tomado los mexicanos durante los más de doscientos años de historia como país independiente. Políticos traidores y vendepatrias los hemos tenido a granel; pero también hemos tenido mexicanos que han sabido luchar por defender nuestra independencia de las potencias extranjeras.
El concepto de independencia es muy difícil que sea comprendido por las actuales generaciones quienes ahora viven, y qué bueno, en "zona de confort". La "zona de confort" no es un bien que se dé gratuitamente sólo o por sí mismo. Es el resultado de millones de mexicanos que murieron sacrificando su vida, economía y tranquilidad hogareña "zona de confort", para que nosotros pudiéramos vivir como hoy vivimos.
PLATO FUERTE.- El tema de la "independencia" no es para analizase desde el punto de vista económico, de la distribución del ingreso, la productividad, la corrupción o el comportamiento de los políticos corruptos. El tema y motivo de las fiestas patrias es otro y muy diferente. Se trata de festinar y valor la independencia de México respecto a los poderes políticos que lo tuvieron cautivo y sumiso bajo el poder de la Corona Española, la invasión militar de los Estados Unidos de Norteamérica o la invasión francesa que nos impuso un impero europeo aquí en nuestra tierra. Eso es lo que se festeja este mes de septiembre.
Estas generaciones no han sabido de hambrunas, guerras civiles, falta de escuelas, falta de universidades públicas. No han sufrido epidemias, persecución ideológica, falta de libertades de expresión, de pensar o de escribir libremente, menos de guerras con potencias extranjeras. Todo esto no les permite valorar el concepto de independencia.
Mucha basura cibernética antimexicana, proviene de organizaciones dedicadas ex profeso a lanzar millones de tonterías mal intencionadas, con el único objetivo de lograr sus muy personales intereses en materia de religión, política o economía.
Estas malévolas organizaciones de redes sociales son pagadas por los diversos partidos políticos u organizaciones, con claros y definidos intereses políticos. Estos grupos están instalados en lujosas oficinas en la Ciudad de México, son muy bien pagados y están dedicados las veinticuatro horas en producir, al amparo del anonimato, "memes" plenos de barbaridades, verdades a medias, claras calumnias etcétera.
Estos "memes" llegan a los teléfonos inteligentes, computadoras o tabletas en donde inocentemente son abiertos, tragados y deglutidos sin ningún análisis racional por parte de millones de mexicanos que los convierten automáticamente en verdades irrefutables.
Si en el pasado algunos medios mentían, deformaban o escondían la verdad a sus lectores, oyentes o televidentes, ahora son millones de mensajes o "memes" con los que se engaña y desorienta a millones de mexicanos.
Los "memes" son aceptados por millones como la verdad absoluta. Nadie o muy pocas personas se toman la molestia de tratar de analizar la verdad de su contenido o la intención real que subyace tras el propio mensaje. Finalmente el receptor se lo traga en su totalidad y de esta manera el manipulador-emisor logra perversamente su objetivo. Es verdaderamente paradójico que ahora que tenemos tanta información la sociedad en general se encuentre tan desinformada y desorientada como nunca.
Por fortuna existen también "memes" nobles, limpios o que invitan a la superación personal, sean todos ellos bienvenidos.
POSTRE.- Quiero aprovechar estas líneas para agradecer al Dr. Blas Flores Dávila, rector de nuestra Universidad Autónoma de Coahuila, al Ing. Salvador Hernández Vélez, secretario General, a Tere Vale, a Nicolás Alvarado, al Ing. Luis Horacio Salinas Aguilera, al Ing. Carlos Alberto Salinas Valdez, al Lic. Marco A. Romero, al Dip. Federal Armando Luna Canales, maestro Armando Guerra Guerra, los periodistas Sigifredo López y Adrián Esquivel y demás amigos de Saltillo, todas sus atenciones con motivo de la presentación de mi libro de arte "Realismo Mágico". Muchas gracias a todos.