Mucho se ha escrito sobre nuestra independencia y la discusión continúa: los nacionalistas marcados, insisten en que el propósito final fue crear al Estado Mexicano, con el sacrificio de héroes que entregaron la vida; otros, que los hechos y circunstancias motivaron a algunos españoles, criollos y mestizos a buscar su separación de España, oportunidad que se presentó con el debilitamiento del imperio por las guerras desgastantes contra otros países europeos.
Martín Cortés, hijo de Hernán, fue uno de los primeros sublevados lanzando la proclama: "alcémonos con la tierra, pues nuestros padres la ganaron a sus costas"; y cómo no, si él mismo había sido despojado de bienes y posiciones que su padre había ganado a pulso.
A la Independencia de México podemos dividirla en cuatro etapas importantes:
La primera, inicia con el Grito de Dolores, el 16 de septiembre de 1810 y termina con la Batalla de la Puerta el Calderón, el 17 de enero de 1811. La segunda, con la presencia de José María Morelos, que en 1811, retoma el espíritu libertario dejado por Hidalgo, fusilado y vejado en Chihuahua.
Con la muerte de Morelos quedó un vacío independentista, cuando José María Calleja casi logra apagar el espíritu libertario y recobrar el control del virreinato, tercera etapa que termina con la aparición del rebelde Vicente Guerrero, quien unido a Agustín de Iturbide logran la victoria, entrando a la capital el 21 de septiembre de 1821.
Ciertamente la Nueva España era una muy importante fuente de divisas para España y los conquistadores habían establecido vetos y prohibiciones para la producción de minerales, caso del azogue y los vinos, entre otras cosas; las tasas impositivas eran grandes y los americanos debían pagarlas sin recibir el beneficio correspondiente.
Como dato curioso: la rebeldía de los jesuitas afincados en Parras de la Fuente, quienes cultivaban la uva en la región, gracias a unos pocos sarmientos que a hurtadillas trajeron; ellos dejaron asentado en algunos informes el descubrimiento de un fruto silvestre similar, en la zona que por su apariencia llamaron "Nuevos Pirineos".
Sin duda que la historia del Padre de la Patria, Miguel Hidalgo y Costilla, es apasionante y más allá del superhombre que han querido presentarnos era un personaje de la época caracterizado por su humanismo, sentido de igualdad y justicia social; claro que como el humano que era, tenía gustos y pasiones que condenaban sus superiores, como aquello del gusto por la música - algunos historiadores lo describen como músico virtuoso, violinista- los saraos y las fiestas de bailables con mujeres. ¿No le parece menos grave que ser pedófilo o irreverente?
Es curioso que en la historia oficial no nos enseñan el sentido del texto íntegro del Grito de Dolores que terminaba con "¡viva Fernando VII", reconociendo a la monarquía.
Otro gran personaje de nuestra historia libertaria fue José María Morelos y Pavón, nacido en Valladolid, hoy Morelia, quien de sacerdote y por la influencia de su rector de seminario de San Nicolás, Miguel Hidalgo, engendró un espíritu libertario y de justicia, para terminar siendo político y militar que tomara a su cargo la guerra civil separatista, hasta ser fusilado en 1815 por Calleja, estratega militar español.
Habrá que abonar a sus razones el antecedente de sus orígenes familiares. Hijo de un indígena carpintero, sufrió las diferencias de clase social y llevado a vivir con unos tíos, logró entrar al seminario para seguir la carrera eclesiástica, buena opción para aquellos con aspiraciones altas y baja estirpe. Con el Congreso de Chilpancingo nos heredó la primera constitución política, declarándonos nación.
Del personaje Vicente Guerrero existen diferentes biografías, algunas proponiéndolo como héroe que sostuvo la Guerra de Independencia a la muerte de Morelos; otros lo presentan como un montañés rebelde, poco instruido, quien con alto sentido de oportunidad se une a Agustín de Iturbide y firma el Plan de Iguala de 1813, recibiendo la encomienda de crear las fuerzas militares del sur y favorecer los propósitos independentistas. Nacido en Tixtla, Guerrero, en 1782 y fusilado en Cuilapan, Oaxaca, en 1831.
Por último, otro grande y muy maltratado por la historia fue Agustín de Iturbide, quien verdaderamente obtuvo el triunfo final y acompañado de Guerrero entró a la capital al frente del Ejército Trigarante.
De él existen historias románticas, como aquella de haber desviado el desfile triunfal para llegar al balcón de su amada -la famosa Güera Mendoza"- y que en su honor, monjas poblanas crearon los Chiles en Nogada.
Poco nos cuentan de que el 15 de septiembre no corresponde al verdadero inicio de la Independencia, fecha que se instituyó para dar nuestro festejado "Grito de Independencia", por corresponder al onomástico del General Porfirio Díaz.
En fin, festajemos nuestra Independencia Nacional, aunque a veces me parece que solamente cambiamos de dictadores, o... ¿Usted qué piensa?
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