Riesgo. El retraso del apagón digital sería un riesgo para el país, consideró el Instituto Federal de Telecomunicaciones.
El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) reconoció ayer los riesgos que representa posponer el apagón analógico, programado para diciembre de este año.
Durante un foro con senadores, el comisionado Adolfo Cuevas dijo que se podrían afectar programas para liberar las bandas de 600 y 700 mega hertz, la licitación de nuevos canales digitales para 2016 y las condiciones de competencia para la nueva cadena nacional de televisión.
"El apagón tiene que darse. La señal más preocupante que podremos dar, dentro y fuera del país, es que la posposición, si así se diera por una ocasión, pudiera invitar a que nuevamente se replantee el tema meses después y se siga postergando", alertó.
Expuso que el despeje de la banda de 700 mega hertz --que se liberará con el apagón-- está ligado a la de 600 Mega Hertz, considerada como el segundo dividendo digital más valioso que se podrá utilizar a futuro para incrementar la oferta, la velocidad y los servicios de la banda ancha.
"Cualquier retraso en el apagón analógico afecta necesariamente a estos programas", refirió.
También, dijo, se afectará la licitación de nuevos canales digitales de TV para 2016.
EN TIEMPO
Cuevas afirmó que, si la SCT entrega la información a tiempo y no se hace ningún cambio a la Constitución, el apagón se concretará el 31 de diciembre de este año.
Sin embargo, añadió, el Gobierno federal deberá entregar toda la información sobre la industria, los operadores y las audiencias, a más tardar la penúltima semana de noviembre.
"Son cuatro semanas si se deseara que la fecha del 31 de diciembre se cumpliera. Ellos tendrían que mandar la información cinco semanas antes para procesarla, tener un pleno y acordar con cuatro semanas de antelación", expresó.