Por ahora Barcelona es líder de la Liga de España, acumula 75 puntos, mientras que los pupilos de Carlo Ancelotti (foto) cayeron a la segunda posición y por ahora suman 73 puntos. (EFE)
El Real Madrid desea recuperar el liderato de la Liga BBVA en la jornada 32 y saltará al césped del Santiago Bernabéu sabiendo si el Barcelona sigue por segunda semana consecutiva, para afrontar, sin el francés Karim Benzema, la visita de un Málaga que aspira a Europa.
En medio de una semana con derbi madrileño europeo a vida o muerte en Liga de Campeones, el Real Madrid retoma el pulso a la Liga con el claro objetivo de regresar al primer puesto.
El empate del Barcelona en Sevilla recortó a dos puntos la distancia y a la espera del Valencia en el Camp Nou, el equipo de Carlo Ancelotti pisará su estadio sabiendo si puede asaltar el liderato o necesita los tres puntos para prolongar la caza del líder.
Tras el buen resultado de las rotaciones de Ancelotti ante el Eibar, el técnico italiano da vueltas al equipo titular ante el Málaga. La victoria es obligada y las concesiones deben ser mínimas.
Cuenta con la baja del francés Karim Benzema, por molestias en su rodilla derecha, y medita dar descanso a Dani Carvajal, Sergio Ramos y algún jugador del centro del campo: Toni Kroos o Luka Modric.
SIN ERRORES
Por su parte, el Barcelona se enfrenta al Valencia en el Camp Nou con el propósito de no perder ni un punto más, tras el empate a dos goles la semana pasada contra el Sevilla, que le ha quitado casi todo el colchón de puntos como líder, una advertencia de que ya no puede cometer otro error.
La visita del Valencia se caracteriza por la llegada de un rival que el año pasado en el mismo escenario y a la misma hora le dio un tremendo susto, al vencer a los azulgrana por 2-3, y en el presente curso viene dispuesto a darlo todo, especialmente porque se encuentra peleando por una de las posiciones de la Liga de Campeones para el año que viene, con el Sevilla acosándolo desde la quinta posición.
A pesar del grave contratiempo sufrido la semana pasada, en el que el equipo catalán no supo defender un 0-2 ante un Sevilla que tuvo contra las cuerdas, el grupo de Luis Enrique Martínez rápidamente se repuso con la llegada del partido de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones, en la que exhibió un gran nivel y sólo la mancha del gol que encajó en la recta final del partido (1-3) sobresale un poco ante una gran actuación azulgrana.