El chico tuvo que pagar una multa por su fechoría. (ESPECIAL)
La obsesión por los videojuegos orillaron a un chico alemán a cometer una locura con su novia.
El hecho se registró a mediados de 2014 en Renania del Norte-Westfalia, Alemania, cuando la pareja del varón llegó a casa y se le ocurrió pasar un rato junto a él, sin embargo, los planes del sujeto eran muy distintos.
Resulta que éste quería seguir jugando en la consola, por lo que al ver la insistencia de su novia para charlar por un momento, decidió servirle una copa de vino con una droga para hacerla dormir durante varias horas.
El sujeto siguió aplicando la misma “técnica” durante semanas, hasta que ella se percató de lo que estaba ocurriendo y decidió poner fin a su relación, no sin antes denunciarlo ante las autoridades.
El respectivo juicio se llevó a cabo meses después, en el que el juez le impuso una multa de 500 euros por su fechoría.
Durante su comparecencia, el inculpado aseguró que “fui estúpido, pero ahora ya me encuentro en el camino correcto”.