Juventus logró su cuarta victoria en los últimos cinco partidos tras imponerse al Nápoles del español Rafael Benítez. (AP)
Juventus venció ayer 3-1 al Napoli para celebrar a lo grande el doblete de títulos en la liga y Copa Italia.
Un gol del centrocampista argentino Roberto Pereyra puso en ventaja a la Juve a los 13 minutos, pero el volante español David López empató para Napoli a los 50, luego que un remate de penal de Lorenzo Insigne fue repelido por el portero juventino Gianluigi Buffon.
Con su primer gol para el club, Stefano Sturaro le dio la ventaja a Juventus a los 77 y Simone Pepe sentenció de penal a los 90, después que el defensor napolitano Miguel Britos fue expulsado en los descuentos para propinarle un cabezazo a Álvaro Morata.
En el último partido de la temporada en su estadio de Turín, Juventus la fiesta por los títulos. Cada uno de los jugadores fueron llamados al centro de la cancha para recibir una medalla y al final su capitán Buffon levantó la copa en medio del aplauso de sus tifosi.
"Una hermosa jornada de fiesta con una hermosa victoria, en que los jugadores demostraron que quieren seguir ganando", dijo el técnico campeón Massimiliano Allegri.
La Juve aún tiene una asignatura: la final de la Liga de Campeones, que disputará el 6 de junio contra el Barcelona en Berlín.
"Debemos recuperar energías físicas y mentales de cara a la final", acotó Allegri. "Deberemos hacer un partido perfecto desde el punto de vista defensivo", expresó.
Allegri se refirió a Lionel Messi, el astro argentino del Barsa: "es difícil marcarlo porque nunca se sabe a dónde va".
La derrota dejó al Napoli con remotas posibilidades de clasificarse a la próxima la Champions, al quedar tres puntos detrás del tercero Lazio.
