Parece que fue ayer pero ya pasaron cuarenta años de que un puñado de ex-preparatorianos que no contaban con los recursos económicos para salir a estudiar fuera, decidieron formar el núcleo universitario en Gómez Palacio, Dgo., en el cual se iba a construir una escuela de medicina veterinaria, entre otras carreras más.
El Dr. Mayagoitia, quien era el gobernador de Dgo., en aquellos entonces, nos cortó la ilusión de inmediato al decirnos que no se iba a hacer ninguna escuela de Veterinaria en Gómez, que bastaba con la que había en Durango capital.
Tristes pero no derrotados aquel grupo entusiasta de estudiantes nos venimos a Torreón y en las aulas de la P.V.C., convocamos a todo aquél que quisiera luchar, porque aquí en Torreón se hiciera una escuela de veterinaria.
Al poco tiempo de esto por aquéllos entonces empezó la campaña política de cambio de gobernador en Coahuila, y por este motivo, fuimos como unos quince alumnos con el candidato a pedirle que nos ayudara en la lucha de nuestro gran sueño de la creación de una escuela veterinaria y Óscar Flores Tapia quien era el "bueno" para Coah.; nos dijo ustedes ayúdenme en la campaña y yo de un "plumazo" les hago su escuela.
Así empezó aquella lucha por lograr aquel gran sueño pues no era más que eso, una ilusión, la creación de la carrera de médico veterinario aquí en Torreón.
Después de innumerables juntas, viajes, entrevistas, y desilusiones y ya habiendo tomado posesión el flamante gobernador como era de suponerse se "rajó" y dijo que no había dinero para la creación de la escuela, pues todo se lo había llevado "Eulalio" el gobernador anterior. Entonces nosotros al sentirnos engañados y usados tomamos otras medidas de presión para obligar a Flores Tapia a que cumpliera su palabra y para eso hicimos diferentes actividades y medidas de presión, paralizamos la economía de Coah. Al tomar las instalaciones de la Recaudación de Rentas del Estado entre otras medidas más pues es bien sabido que Coahuila sin Torreón, económicamente no fuera la misma.
Fuimos golpeados y encarcelados por la policía represora al mando de Lemuel Burciaga, pero aún así no nos dimos por vencidos y elevamos las apuestas y fuimos a tomar el Palacio de Gobierno de Saltillo donde confrontamos al gobernador diciéndole por voz de mi compañero Camacho, que si no era suficientemente hombre para cumplir su palabra, al no tener ninguna respuesta, de ahí pedimos audiencia con el mismísimo Luis Echeverría Álvarez, Presidente de México, cuando apenas habían pasado unos cuantos años de Tlatelolco "2 de octubre". De esa reunión en Los Pinos conseguimos el "Comité Central" el dinero para edificar las primeras instalaciones físicas que estuvieron en Mieleras, cabe hacer notar que casi un año antes, habíamos ido a reunirnos con la Asociación de Médicos Veterinarios de La Laguna, para pedirles que el que quisiera "sin pago" nos diera clases, y sólo uno accedió quien fue el primer maestro que tuvimos Gustavo Lastra Durán, el cual junto con el Ing. San Miguel nos echaron la mano con la organización. Al poco tiempo hubo cambio de directiva y el próximo presidente fue Raúl González Duque, quien de rebote y por casualidad, eso sí con mucho entusiasmo, nos acompañó en la lucha de nuestros sueño.
Después se formó la primera planta de maestros, conformada por Gustavo Lastra, Raúl González Duque, Enrique Echávez, Jorge Franco, Carlos Michelena y en el segundo semestre se sumaron David Villareal, Rosa María Guzmán, Víctor Ruelas, en el siguiente semestre Rodrigo Díaz, Luciano Juárez, Carlos Martín del Campo, Antonio Morfín, Jesús Mestas entre otros.
Cómo han cambiado las cosas, antes veían la carrera de médico veterinario, como una carrera de segunda, y hoy que los tiempos han cambiado, que ya existe la cultura del cuidado a los animales y que la carrera de médico veterinario fue abrazada, protegida y agrandada por la entonces recién creada Universidad Antonio Narro, quien debido a aquella lucha decidió crear su unidad aquí en La Laguna y sin temor a equivocarme pienso, que es la mejor y principal universidad agropecuaria en el norte de México.
Con el temor de omitir sin querer a alguien, menciono algunas personas que conformaron aquella primera generación, muchas por desgracia no terminaron o cambiaron de carrera y otros más ya se nos adelantaron en el camino.
Mario Alberto Lira Gutiérrez, José Manuel de la Peña, Héctor Manuel Camacho Galván, Miguel Dávila Dávila, Cruz Emiliano González Ugarte, César Cepeda Rubalcava, Gregorio Rodríguez García, Rodolfo Cruz Ramírez, Héctor González Rodríguez, Antonio González, Concepción Aguilar, Aurora Rodríguez, Nardalina Adame, Paulina Díaz, Román Duarte Salazar, Ignacio Ramírez, Roberto Dingler Gutiérrez, Eduardo Muñoz Fernández, Juan Luis Abraham Gutiérrez, Juan Antonio Velázquez Cruz, Óscar Villarreal Martínez, José Cruz Sotomayor, Tere Guerrero, Rubén Borroel González, Gilberto Olivares Serna, David Arellano, Jesús Quezada, Gerardo Gómez Roja, Julián René Rangel Ornelas.
Gracias al profesor Abel Valadez, por habernos prestado las instalaciones de la Escuela Secundaria Nocturna para Trabajadores ubicada en Tabachines y Sicomoros de la colonia Torreón Jardín, actualmente Secundaria Técnica No. 83 y a la familia Bredée por habernos prestado las instalaciones del casco del antiguo rancho de ellos que se encontraban en lo que hoy es la colonia Granjas San Isidro, ya que en la primera recibimos las primeras clases teóricas y en la segunda las prácticas.
Y ahora para terminar una gota de filosofía:
Sálvate tú Vivianita… yo ya me perdí. (Película).
