ENTRADA.- Mi contertulio de café, Juan Adolfo von Bertrab conocedor de la materia, me hacía algunas reflexiones sobre el tema acuífero en la Comarca, que por su interés considero beneficioso divulgar, entre otras, las siguientes:
Cuando se tiene un problema a resolver, lo peor es no hacer nada, es preferible tomar una decisión razonada y aplicarla, ya que es más fácil corregirla que partir de cero.
SOPA.- ¿Por qué esta reflexión? Bueno lo que pasa es que en La Laguna, llevamos más de sesenta años hablando de que los mantos acuíferos se están agotando y que llegaremos a un punto en que sea incosteable el bombear. Además, que se ha sufrido un gravísimo deterioro respecto de la calidad del agua que se extrae, totalmente fuera de la Norma Internacional O.M.S. (Organización Mundial de la Salud), que la fija en 0.01 ppm de As, aunque la norma nacional cómodamente la fija en 0.025 ppm.
No obstante que se han gastado cientos de millones de pesos en estudios, seguimos igual, abatiendo los niveles y bombeando el agua subterránea cada año a mayor profundidad. El último estudio y propuesta hasta este momento fue presentado para lograr ahorrar y racionalizar el gasto de agua. Se trata del llamado Plan para el Manejo Sustentable del Recurso Hídrico en la Región Lagunera (Coahuila-Durango) presentado por la Semarnat y Conagua.
PLATO FUERTE.- Actualmente el Agua Subterránea que es Propiedad de la Nación, es manejada y controlada por el Cotas (Comité Técnico de Aguas Subterráneas) de Conagua. Este Comité se encuentra integrado única y exclusivamente por los mismos agricultores usuarios del recurso. En estas condiciones será verdaderamente imposible que tomen ellos mismos medidas para corregir la sobreexplotación del acuífero, sería como hacerse el Hara Kiri. Es como si Pemex fuera manejado por los dueños de las gasolineras.
Es muy fácil criticar, mejor sería hacer propuestas viables y que resuelvan el realmente la causa original del problema. Tenemos las leyes para lograrlo, sólo falta la decisión del Presidente de la República y los Secretarios involucrados en la problemática del Agua en la Región Lagunera. Pero aquí topamos una vez más, con el cáncer que está corroyendo al país: la falta de de voluntad para cumplir y hacer cumplir la ley, evitar así la impunidad y con ello la corrupción.
A pocos lugares en el Altiplano de la República Mexicana le llega tanta agua como a la Región Lagunera, pero esa cantidad es finita. Sabemos a cuanto asciende ese recurso hídrico y todas las autoridades saben también que no se debe gastar más de lo que la naturaleza nos aporta cada año. En el Plan de Manejo Sustentable mencionado, se reconoce públicamente que la recarga madia anual del acuífero es de 518.9 millones de metros cúbicos, pero que la extracción total es de 1,221.8 millones de metros cúbicos. Esto nos indica que la extracción es más del doble que la recarga (135 %). De no corregir este gravísimo problema nos precipitaremos a un estado de crisis irreversible.
Si en verdad se quiere resolver el problema, tendríamos que considerar lo siguiente:
El Agua es propiedad de la Nación y los propietarios de pozos sean particulares u organismos oficiales, tienen únicamente una concesión para extraer un volumen determinado (del orden de 600 millones de metros cúbicos anuales), pero se extrae el doble por los concesionarios.
Las concesiones no son títulos de propiedad y tan sólo se otorgan para el usufructo de un volumen determinado.
Las concesiones se pueden cancelar, modificar, reducir, etcétera, todo depende de las necesidades de la Propietaria o sea la Nación, y del interés público.
El Agua Rodada o sea la que proviene de las presas regionales se distribuye por superficies de cultivo dando motivo a múltiples irregularidades. Esto se debe modificar
Con algunas acciones se podría empezar a corregir la sobreexplotación hídrica en La Laguna:
POSTRE.- Hacer que se respeten los volúmenes concesionados obligándose el concesionario a optimizar el uso del recurso.
El agua rodada sea entregada por volumen y no por superficie de cultivo.
Actualmente la eficiencia del agua que sale de la Presa Lázaro Cárdenas es del orden del 35 % que resulta bajísimo. (Si se mejorara un 20 % la eficiencia, se ahorrarían del orden de 140 millones de metros cúbicos por año).
Queda acreditado que tenemos las leyes para solucionar el problema, tan sólo falta la decisión y voluntad política de hacerlo.