Este año dual México-GB abre la posibilidad para que la sociedad civil británica se solidarice con la sociedad mexicana.
Distraídos por el séquito de familiares y equipo de apoyo con los que decidió viajar el presidente Enrique Peña Nieto para realizar su visita a Londres, en el contexto del año dual México-Reino Unido, la mayoría de las imágenes y reportes que no proviene de fuente oficial se concentraron en la frivolidad con la que se desenvolvió en sus encuentros con la realeza y el gobierno británico.
¿Acaso a Peña Nieto y a sus colaboradores les pasó desapercibido lo contradictorio que resulta presentarse en un encuentro diplomático obviando la indignación social mientras evidencian su ostentación?
A pesar de los intentos por no darle importancia a las reacciones negativas que emergieron en Reino Unido, algunos medios británicos cubrieron con nitidez el rechazo que para muchos provocó su visita.
El periódico The Guardian incluye las fuertes declaraciones del viceprimer ministro británico Nick Clegg, quien de la mano del magnate Richard Branson, condenó la estrategia de choque frontal y aseguró que la lucha mundial contra las drogas ha sido un fracaso miserable. Hicieron referencia a la visita de Peña Nieto y declararon que era necesario recordar a las 100 mil personas muertas sólo en México desde 2006.
Con una enorme piñata amarilla Amnistía Internacional dio recepción al Presidente de México, en el interior había quince mil cartas contra la tortura. Coincidentemente unos días después Juan Méndez, relator de la ONU quien hoy mismo presenta su informe sobre tortura en Ginebra, aseguró que en México la tortura es un grave problema y mostró su preocupación por que el Protocolo de Estambul sigue sin aplicarse en nuestro país. Además, justo cuando Peña Nieto reivindicaba el compromiso de su gobierno con los derechos humanos en el Parlamento británico, alrededor de 150 personas se manifestaron por los hechos de Ayotzinapa en Downing Street, frente la residencia del primer ministro David Cameron.
En la conversación telefónica que sostuve con Etienne Von Bertrab académico de la University College London, hizo hincapié en el compromiso de dos reconocidos parlamentarios británicos que han hecho explícita su preocupación por la violación de derechos humanos en México. Ellos son Jeremy Corbyn y Cathy Jamieson quienes han impulsado que la agenda de los gobiernos británico y mexicano para el trabajo conjunto de este año sea monitoreada y revisada por las sociedades civiles de ambos países.
De acuerdo con Von Bertrab, la preocupación de varios líderes políticos en Gran Bretaña no es nueva: "en noviembre, 44 miembros del Parlamento Británico firmaron una moción expresando su preocupación por la desaparición de los 43 normalistas, así como por los miles de desaparecidos y muertos, demandando que la agenda de los derechos humanos en México sea tratada con la importancia y urgencia que merece, por ambos países".
La visita del Presidente de México en este contexto detonó una articulación social que apenas comienza. Bertrab asegura que fue un buen momento para que grupos sociales que trabajaban deshilvanados en análisis y propuestas sobre la problemática mexicana en Reino Unido, se vinculen y organicen para generar diagnósticos y propuestas compartidas. Parafraseando al parlamentario Jeremy Corbyn, este año dual se abre la posibilidad para que la sociedad civil británica se solidarice con la sociedad mexicana.
Para este propósito, varios colectivos han abierto un sitio en Internet que incorporará notas, reportes y videos con información alternativa sobre lo que el año dual representa para la defensa binacional de los derechos humanos www.ukmx2015.org.
Analista política y activista ciudadana