Cuestionamientos. El gerente del Simas se reunió ayer con regidores que integran la Comisión del Agua del Cabildo. (IVÁN CORPUS)
Xavier Herrera Arroyo, gerente del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (Simas), dijo que la prioridad en estos momentos para la empresa abastecedora es atender el litigio que se enfrenta con la empresa Ecoagua de Torreón.
Asegura que "actualmente es imposible concesionarla o proyectar la licitación de una nueva Planta Tratadora de Aguas Residuales (PTAR), cuando aún no se tiene un fallo al respecto. No podemos hacer absolutamente nada más que aportar los elementos de prueba suficientes de las razones por las que se canceló anticipadamente la concesión, la falta de una calidad del agua tratada en función de lo que se contrató".
Para Herrera Arroyo, todo lo que se diga en contrario a esta postura "son meras especulaciones que evidencian ignorancia de la trascendencia del proceso legal y todo lo que implica".
El estado legal del proceso, luego de que el Juez Tercero de Distrito en La Laguna otorgó al Simas la facultad de hacerse cargo de la operación de la PTAR es que seguirá hasta la resolución de fondo.
El proceso podría tardar más de un año, dice Herrera de acuerdo al despacho externo contratado para atender el caso.
Herrera se reunió ayer con regidores que integran la Comisión del Agua del Cabildo y que es presidida por el panista Ignacio Corona Rodríguez.
Recibió de éstos un voto de confianza para que agoten los recursos legales, pero sin perder de vista hacer un buen manejo de la PTAR, ahora bajo su responsabilidad, de manera que no se deje caer más la operación.
Los ediles le refirieron al gerente del Simas las versiones de que quitarle la planta a Ecoagua había sido sólo una estrategia del Consejo Directivo "para hacer negocio y concesionarla a otra empresa para beneficiar a terceros".
El gerente del Simas esbozó una sonrisa y dijo que "es falso, el motivo fue deshacernos de un contrato sumamente desventajoso para el Simas, algo que era una pesada carga y aún no sabemos en qué va a quedar''.
Explica que una postura cómoda hubiera sido aceptarle a Ecoagua la propuesta que hizo de obtener una nueva concesión, por treinta años, con pagos mensuales más bajos, pero con la misma agua inservible.