Tras varios años de sufrir los estragos de la violencia y la inseguridad, la popular Sultana del Norte ha recuperado sus bríos y su reconocido dinamismo económico y social.
Atrás parecen quedar los tiempos cuando los Zetas y los líderes del Cártel del Golfo se disputaban a balazos esta plaza con graves repercusiones para la comunidad regiomontana.
Algunos recordarán el devastador incendio del Casino Royale, en agosto del 2011, donde murieron 52 personas y que fue provocado por el crimen organizado, sin olvidar las constantes balaceras, bloqueos vehiculares y secuestros que asolaron a esta metrópoli.
Las autoridades --en especial las federales-- atacaron de frente a las bandas del narcotráfico quienes no tuvieron más remedio que refugiarse en plazas vecinas de Tamaulipas y Coahuila.
No obstante algunos capos mantienen operaciones de bajo perfil, prueba de ello fueron las capturas recientes de dos cabecillas de los Zetas realizadas en el municipio de San Pedro Garza García, donde habitan los empresarios más acaudalados de Nuevo León.
Monterrey destaca sobre el resto del país por la calidad y dimensión de sus empresas locales que han conquistado por igual el mercado nacional que el internacional.
Así tienen a Cemex, Cervecería Cuauhtémoc, Alfa, Femsa, Soriana, Oxxo, Banorte, Maseca, Ternium y Sigma, entre muchas más compañías que han sido fundadas o bien han establecido sus corporativos en esta región.
Al mismo tiempo, los regiomontanos desarrollaron instituciones educativas de primera clase para respaldar el crecimiento industrial.
El Tecnológico de Monterrey, la Universidad de Monterey y la Universidad Autónoma de Nuevo León, son tres organizaciones que son ejemplo de calidad mundial en educación superior.
Pero nadie es perfecto en este mundo, todavía es hora que los neoloneses no han encontrado la cuadratura al círculo en el ámbito político a pesar de sus logros económicos, culturales y educativos.
Así lo muestra la clase en el poder en donde destaca su mediocridad además de sus frecuentes escándalos por corrupción y por la ineptitud de los funcionarios públicos.
Con escasas excepciones, sus gobernadores siempre han quedado a deber a la ciudadanía con todo y que cuentan con grandes recursos económicos y el apoyo de sólidas empresas.
Rodrigo Medina de la Cruz, el gobernador en turno, no ha podido con el paquete a pesar de su juventud y preparación. Y lo mismo ocurrió con su antecesor Natividad González Parás de quien mucho se esperaba y terminó envuelto en acusaciones de malos manejos y corrupción.
Para acabarla de amolar esta mala racha de políticos al parecer no será superada en el corto plazo.
La contienda electoral de este 2015 ha levantado gran revuelo pero lamentablemente con una caballada flaca y desnutrida.
La candidata del PRI, Ivonne Álvarez García, tiene 36 años de edad y además de haber sido senadora fue conductora de televisión de programas del corte de Adal Ramones.
El candidato del PAN, Felipe de Jesús Cantú, fue alcalde de Monterrey, diputado local y funcionario federal, su trayectoria es interesante pero según los expertos no le alcanzará para ganar la elección por su bajo perfil y popularidad.
En tercer lugar y muy cerca del panista se encuentra el candidato independiente, Jaime Rodríguez Calderón, conocido como El Bronco, un expriista de amplio carisma y empuje pero que difícilmente triunfará por la falta de una estructura partidista y porque tampoco tiene nivel de gobernador.
Así las cosas, Ivonne se perfila para asumir la gubernatura con una escasa preparación política y académica en un estado donde operan varias de las empresas e instituciones de mayor envergadura de México.
Pareciera, pues, que a cambio de su riqueza económica, Nuevo León ha sido condenado a sufrir una paupérrima clase política. Les advertimos que cualquier semejanza o similitud con otras entidades del país, será mera coincidencia.
APUNTE FINAL
Impresionante la euforia nacional que desató el gol de Javier "Chicharito" Hernández en contra del Atlético de Madrid... Si ese tiempo que los mexicanos dedicaron a festejar la anotación lo empleáramos diariamente a trabajar a conciencia, en poco tiempo este México sería otro. Pero como dice el viejo refrán: una vez al año no hace daño.
Comentarios a
jhealy1957@gmail.com