Habitantes de Chilapa de Álvarez salieron a las calles de ese municipio que ha sido escenario de balaceras y diversos hechos violentos, para exigir la salida de hombres armados que se asumen como policías comunitarios y que desde el sábado patrullan con sus rifles las calles de la ciudad.
La marcha inició casi a las 15:00 horas. Los pobladores de ese municipio, región de la Montaña baja de la entidad, se concentraron en la Catedral tras escuchar el repique de las campanas.
La gente decidió salir a las calles para exigir la salida de los hombres armados porque desconocen de quiénes se trata.
Esos hombres son de al menos 11 comunidades del sur de Chilapa, una zona limítrofe con Quechultenango, municipio vecino de la zona Centro, bastión del grupo delictivo "Los Ardillos", que mantiene una disputa del territorio con "Los Rojos", otro grupo que opera en la región según reportes de la Secretaría de Seguridad Pública.
Los pobladores portaban mantas donde se leía: "Fuera comunitarios". La marcha no fue convocada por nadie en específico, sino a través de cuentas con nombres ficticios para invitar a la ciudadanía a exigir que se les garantice la seguridad.
Tras 10 días del asesinato de Ulises Fabián Quiroz, candidato a la alcaldía de Chilapa, han ocurrido diversos hechos de violencia.
Los civiles armados justifican su presencia al alza de inseguridad y falta de garantías para salir a las calles. Mucha gente asegura que esas personas no pertenecen a ninguna corporación comunitaria.
La Secretaría de Educación de Guerrero, además, admitió que por los hechos de violencia en comunidades de la periferia y en la cabecera municipal, se reanudarían las actividades escolares hasta el próximo miércoles.
En Chilapa, luego de que renunciara el director de la Policía Municipal, Job Encarnación Cuenca, la Fuerza Estatal asumió el control de la seguridad en coordinación con la Gendarmería Nacional y el Ejército.
