Los menores infractores no nacen en las aulas. Su conducta se debe a una serie de factores que intervienen como la propia familia, la religión, amigos y de las personas que lo rodean, dijo el subdirector de Servicios Educativos en la región Lagunera de Coahuila. "Si nosotros tuviéramos la responsabilidad de la actuación de todos los que pasan por un aula, no habría delincuencia", aseguró.
Esto ante el incremento en el número de menores infractores en la ciudad, así como la presunta participación de un menor de edad en el homicidio del conductor de televisión Jesús Tapia Rodríguez, en el Municipio de Parras de la Fuente, Coahuila.
Fue en la primera sesión del Consejo Municipal de Garantía de los Derechos Humanos de Niños y Niñas de Torreón, el presidente del Tribunal de Justicia Municipal, Jesús Jasso Fraire informó que en los 14 meses de la actual Administración Municipal, más de mil 700 menores han sido remitidos ante esta dependencia tras cometer una falta administrativa, de los cuales 119 menores corresponden a este año.
Ante tal fenómeno el subsecretario dijo "tenemos las condiciones para formarlos e informarlos y para educarlos, pero no podemos responsabilizarnos de su actuar porque desgraciada o afortunadamente, la conducta humana es producto de una multiplicidad de factores y no podemos decir ahora que la escuela es culpable de todo lo que una persona haga".
Pero si al interior la conducta del menor transgreden las normas de conducta y sus hechos se pueden catalogar como delitos, las autoridades escolares están obligadas a dar parte a la Procuraduría de los Niños, las Niñas y la Familia (Pronnif) como parte del protocolo establecido en los planteles escolares.
"Yo le puedo asegurar que al interior de las escuelas muy difícilmente un menor genera conductas de carácter delictivo que puedan ser consideradas como un delito de carácter penal", recalcó Zúñiga, aunque reconoció que "no quiero decir que los niños que vayan a una escuela no hayan cometido un acto de esa naturaleza, pero no al interior (de la escuela)".
Hasta el momento no se ha registrado caso de que los menores porten armas de fuego en los planteles, las cuales podrían detectarse dentro del programa de "Mochila sana y segura", el cual dijo sigue vigente y se lleva a cabo de manera esporádica, aleatoria y sin programación, "de lo contrario perdería su efecto".
