Los gobiernos de Roma, tanto republicanos como imperiales, preocupados por la carencia de agua en la ciudad capital y varias urbes más, construyeron numerosos acueductos para llevar ese preciado líquido a los ciudadanos, independientemente de su capacidad económica o condición social. Estos acueductos se ubican entre los éxitos de ingeniería más destacados del mundo y no pudieron igualarse por muchos siglos y hasta milenios. Hoy en día pueden aún admirarse en múltiples metrópolis de Europa que aún mantienen y usan los antiguos caminos de agua,
El sentido social de los romanos; lo mismo la plebe que los patricios o aristócratas era servir a cualquier gran ciudad lo mismo que a pequeñas y a centros de producción. Roma, contaba con agua potable, saludable y consumible para un millón de habitantes; abasto público y/o en las casas de los ricos, proporcionada por once acueductos, los cuales surtían numerosos baños y fuentes en la ciudad, así como finalmente vaciándose en la cloaca máxima, donde desempeñaban su última función, la de remover los desperdicios urbanos.
El primer acueducto de Roma fue el "Aqua Appia", con 16.5 kilómetros y captaba agua desde las fuentes lejanas a la ciudad y era prácticamente subterráneo. Otro el "Aqua Marcia" era el más largo con 91.4 kilómetros de longitud; Este acueducto recogía las aguas desde la parte alta de la cuenca del río Aniene. Existían además muchos otros conductos que mantenían limpias e hidratadas las ciudades latinas.
Pero ¿por qué ese interés por el agua y la sanidad en una época en que no existían precisamente normas o criterios ambientalistas? La respuesta tal vez la encontremos en el nombre de Roma que se representa con las letras SPQR que indican: "Senatus Populus que Romanus", cuya traducción es «el Senado y el Pueblo Romano». Dicho con mayor precisión: El Estado Romano se fundamentaba en una forma de consenso entre dos entidades legales, el Senado Romano y el "Pueblo Romano". Comentándolo de otra manera: Existía un marcado acercamiento entre gobierno y pueblo; un interés por unir esfuerzos para lograr una vida digna para todo romano. Un maridaje social de intereses que logró la edificación del más grande imperio de la antigüedad; eso demuestra que una ciudadanía consciente y un gobierno ético paga con creces todo esfuerzo.
De hace unos días a la fecha, prácticamente después de las elecciones, gran cantidad de colonias y el Centro mismo de Torreón se ha enfrentado a la carencia de agua potable, amén de graves problemas de drenaje. Simas, la empresa paramunicipal responsable del agua y saneamiento de la ciudad ha culpado a múltiples actores de esta insoportable carencia que se acrecienta en la medida en que el calor se hace más sofocante. Lo único cierto es que la insuficiencia de agua en la mayor parte de Torreón se ha agudizado y no se ofrecen, al momento actual, soluciones viables, se habla de la perforación de pozos en las próximas semanas, pero: ¿¿¿Y mientras qué???
Según el presidente municipal de Torreón en declaración formal aseveró: "No hay una crisis de agua, yo creo que dentro de los calores en este verano, hay un alto consumo, hay un crecimiento inevitable de la población hacia el suroriente de la ciudad, nosotros hemos ido garantizando, por sectores, el suministro de agua potable, y estos sectores faltaban; desgraciadamente, como todo, en las obras de drenaje pluvial, me volvieron a agarrar las lluvias en medio de la construcción en Residencial del Norte y otras partes del oriente"
Ahora bien, cabe hacer la siguiente pregunta: ¿Está usted, distinguido lector, seguro de que tiene sed y de que no hay agua en su domicilio? No sea que es otra falsa apreciación suya esta carencia, esa sed insufrible es producto de alguna enfermedad y que, como aseguran las autoridades de la inseguridad: No es cierto que los ciudadanos nos sintamos inseguros; es una falsa estimación de algunos enemigos del gobierno.
Pero encaremos la realidad desde una perspectiva más amplia: Hoy en día nos enfrentamos continuamente a la visión neoliberal de ofrecer en venta los recursos que antes poseía el gobierno. Esta política se inició en los 80's y se acrecentó en los noventas con el salinato; las autoridades de todos los niveles se deshicieron de muchas empresas y las ofrecieron a los particulares; esto no es del todo malo, muchas de ellas eran altamente ineficientes y se llevan miles de millones de pesos en su mantenimiento y/o, hasta rescate, pero de ahí a que ciertas actividades de servicios esenciales a la población puedan ser privatizados, debe ser muy bien reflexionado y sobre todo, sopesado por toda la comunidad.
A que me refiero: Pues tal parece que Don Antonio López de Santa Anna ha resucitado y ha venido a engrosar la nómina municipal de Torreón, se ha convertido en asesor personal del edil de esta ciudad: ahora se empiezan a vender calles y tal vez, pronto se ofrezca la privatización de Simas; esa acción puede empezar con una campaña de desprestigio a la empresa mencionada, se hace odiosa a la comunidad, la que, cuando se informa que se privatizará, pues aplaude, como alabó el famoso caso de los megatanques que después de una serie de recriminaciones a las administraciones anteriores, simplemente los desaparecieron, acabamos de ver la misma situación en lo que se refiere a la planta tratadora de aguas residuales; en fin.
Cabe aclarar que todo esto no está sacado de la manga; ya se ha intentado por los gobiernos municipales priistas de otras ciudades, como Saltillo, por ejemplo, en años anteriores, ofrecer a empresas privadas el suministro de agua potable y el saneamiento; ¿Por qué no buscar hacer lo mismo en la olvidada y vilipendiada Torreón?; ciudad odiada y abandonada por el moreirato. Y bien, con esto iniciamos, otra vez una posible controversia gobierno - ciudadanos y recibiremos, una vez más la crítica de que la polémica la hacen los medios de comunicación, pero aquí recuerdo a la décima musa cuando expresa: "Él mismo empaña el espejo y siente que no está limpio"
Concluyo con una frase del genio científico y artístico más grande de la humanidad Leonardo Da Vinci: "El agua es la fuerza motriz de toda la naturaleza" ¿Será Torreón una isla fuera de la naturaleza?