MINUTO ROTARIO
En Fiji, los estudiantes utilizan tabletas para explorar el mundo.
A sus 17 años, Asenaca Sepa sueña con ser enfermera. Su compañera Laisenia Kidia quiere estudiar biología marina. Ellas son estudiantes de secundaria de la Bucalevu Secondary School en la isla Taveuni (Fiji), cuyos ricos suelos y la abundancia de su flora la han hecho merecer el sobrenombre de "la isla jardín". Sus numerosas cascadas y sus bellas puestas de sol hacen de la isla un famoso destino turístico, pero aparte de los esporádicos contactos con los turistas, los habitantes de la isla viven relativamente aislados del mundo. El gobierno es la principal fuente de empleo y, para aquellas personas que no consiguen un trabajo en la administración pública, quedan pocas opciones aparte de la agricultura. En Fiji, 30% de los estudiantes concluyen sus estudios secundarios y sólo 10% acceden a la universidad. La pobreza y la falta de infraestructura limitan el acceso de los isleños a la tecnología avanzada.
Geoffrey Amos, socio del Club Rotario de Taveuni Island, explica que la carencia de herramientas tecnológicas en las escuelas preocupaba a los socios del club, quienes deseaban que los estudiantes pudieran encontrar empleo o continuar sus estudios en la universidad. "Nuestro deseo era que adquirieran conocimientos informáticos que les permitieran acceder en mejores condiciones al mercado laboral".
En colaboración con la Auckland University of Technology y los Clubes Rotarios de Newmarket, Botany East Tamaki y Ellerslie Sunrise (Nueva Zelanda), los rotarios de la isla lanzaron un proyecto para ofrecer 70 tabletas a la Bucalevu Secondary School y a la cercana Niusawa Methodist High School. Los rotarios recibieron fondos de los Distritos 9920 y 9970, así como de una subvención compartida.
La ex becaria de Rotary Kelsi Cox, canadiense que cursó estudios en Nueva Zelanda, lideró el equipo que capacitó a los maestros y estudiantes en el uso de las tabletas. "Estos dispositivos brindan acceso a todo un mundo de información y llevan a sus usuarios a prácticamente cualquier lugar del mundo", explica Cox.
Los estudiantes adoptaron los dispositivos inmediatamente. "Es como tener cien libros de texto al alcance de tus dedos", comenta Sepa. Durante la capacitación, el grupo utilizó una aplicación sobre ciencias para estudiar la estructura celular. "Cuando vi las fotos y las definiciones, me quedó claro lo que es una célula". Kidia añade que la tableta la ayudará a prepararse para la universidad.
Los dispositivos vinieron con distintas aplicaciones educativas, así como herramientas para que los estudiantes graben audio y video. De este modo, podrán documentar su cultura y vivencias más allá del aula escolar.
"Es precisamente lo que necesitaban para crear un cambio positivo en su comunidad", concluye Cox. El proyecto ya ha logrado resultados, de lo cual da fe Amos, quien informa que los resultados escolares de los estudiantes mejoraron durante el año 2014. Además, ahora cuentan con conocimientos informáticos que les ayudarán a proseguir sus estudios o a encontrar mejores trabajos.
Por Stuart Cleland
The Rotarian.
"ILUMINEMOS ROTARY".
Joseignaciom47@gmail.com