El Señor hizo el arco iris.
Después creó los amaneceres y el crepúsculo.
Luego llenó el cielo de estrellas.
Seguidamente puso en la tierra las flores y las mariposas, y en las aguas marinas los corales, las anémonas y los caballitos de mar.
El Espíritu veía cómo el Creador daba forma a todas esas hermosuras. Fue hacia él y le dijo con tono de reproche:
-¿Qué no puedes dejar de presumir?
¡Hasta mañana!...