El muchacho y su novia están a solas en su banca del parque, junto al árbol joven a cuya sombra se juraron amarse para siempre
Ahí van todos los días a platicar.
A ella se le cae la flor que llevaba en el cabello.
Él la recoge, pero no se la da.
La guarda como preciada joya.
Cuando llega a su casa la pone entre las páginas de un libro, a fin de conservarla para siempre.
El anciano está a solas en su banca del parque.
Ahí va todos los días a recordar.
Cae una hoja del viejo árbol que está junto a la banca.
El anciano la recoge, como si algo de él hubiera caído.
Cuando llega a su casa la pone entre las páginas del libro, ahí donde está la flor.
¡Hasta mañana!...