Dos agentes de la policía turca y siete yihadistas del Estado Islámico (EI) murieron hoy en un tiroteo ocurrido en el sureste del país, en el marco del operativo antiterrorista contra ese grupo, tras el atentado del pasado 10 de octubre.
El enfrentamiento se registró la madrugada de este lunes en Kayapinar, en la sureña provincia de Diyarbakir, después de que la policía allanó más de una docena de casas, como parte del operativo para dar con los autores de los ataques en Ankara, que dejaron 102 muertos.
El viceprimer ministro turco, Numan Kurtulmu Diyarbakir, confirmó esta tarde que dos policías murieron y cinco resultaron heridos durante el enfrentamiento, aunque la agencia informativa Anadolu aseguró que los uniformados murieron al estallar un explosivo a la entrada de un domicilio.
"Una célula importante del Estado Islámico (EI) ha sido neutralizada", afirmó Kurtulmu en declaraciones la prensa nacional e internacional en Estambul, tras asegurar que otros 12 miembros del grupo extremista fueron capturados con vida.
El viceprimer ministro indicó que las autoridades trabajan para identificar a los miembros del EI detenidos en el operativo y para descubrir sus conexiones en otras ciudades del país y evitar actos similares a los de Ankara.
Dos atacantes suicidas se inmolaron la mañana del pasado sábado 10 de octubre en medio de los participante a la denominada Marcha por la Paz, cerca de la principal estación de tren de Ankara, provocando la muerte de al menos 102 personas y más de 245 heridos, según cifras oficiales.
Las autoridades turcas han ampliado en las últimas semanas sus operaciones antiterrorista en varias zonas del país para dar con las células del EI sospechosas del doble atentado suicida.
La semana pasada, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, aseguró que la Inteligencia siria, militantes del proscripto Partido de Los Trabajadores del Kurdistán y del EI, estaban detrás del ataque contra una manifestación de activistas pacífica.
La Policía turca arrestó a cuatro supuestos miembros del EI, entre ellos uno identificado como responsable de la seguridad en el traslado de los dos sospechosos que se inmolaron frente a la estación de tren de la capital.
El doble atentado fue similar al ocurrido el 20 de julio pasado en la ciudad turca de Suruc, en el que perdieron la vida 33 activistas y partidarios del PKK, que fue perpetrado por un joven turco, que resultó hermano de uno de los dos terroristas que atentaron en la capital turca.
De acuerdo con las investigaciones del caso, Omer Deniz Dündar habría detonado uno de los dos explosivos en medio de la marcha pacífica en Ankara y su hermano gemelo Mahmut Gazi Dündar es el responsable de los ataques en Suruc.
Los dos hermanos tendrían presuntos vínculos con la organización terrorista Al Qaeda y habrían sido entrenados por el EI en un campo de la vecina Irak, aunque las investigaciones aún no concluyen.