Crufts es el certamen canino con mayor renombre a nivel mundial, sin embargo han ocurrido incidentes como envenenamiento, lo cual ha matado a ejemplares. Aún se desconoce el autor de los hechos. (Twitter)
Miles de perros llegaron la semana pasada a Birmingham (Inglaterra) para participar en Crufts, el mayor y más renombrado concurso canino del mundo.
A diferencia de otros años, la cita perruna no se quedó esta vez en las páginas de eventos sociales sino que saltó a la sección policial y a la primera plana de medios como The Telegraph, Daily Mirror y la BBC.
Todo empezó 24 horas después de finalizada la exhibición, cuando Jagger, un setter irlandés de 3 años, murió apenas llegó con sus dueños a Bélgica, país en el que residen. La veterinaria que practicó la autopsia encontró trozos de carne envenenados en el estómago."Nos dijeron que hallaron cubos de una clase de bistec, los cuales estaban cocidos con veneno en el interior", le dijo Jeremy Bott, uno de los acongojados amos, a la BBC. "La veterinaria cree que posiblemente fuera una mezcla de dos o tres tipos de veneno", agregó.
El asunto tomó ribetes más inquietantes cuando el Daily Mirror publicó en portada que otros seis animales presentes en Crufts tenían trazas de haber sido envenenados y, peor todavía, cuando se supo que uno de ellos -un shitzu- también cayó muerto.
¿Quién es el culpable?
Estos envenenamientos múltiples han causado no solo consternación entre los amigos de los animales y los fanáticos de estas competencias, sino también la discusión en la sociedad inglesa sobre el lado oscuro de estos ultracompetitivos concursos y lo lejos que se puede llegar con tal de ganar.
Si bien Crufts no es el evento canino que mayores premios económicos da, sí es el que otorga más estatus y más reconocimiento en el mundo canino. Neil Tweedie, del Daily Mail, acaba de publicar una extensa lista de trucos sucios de los que se valen los dueños de los quiltros para sacarse de encima a los rivales, tales como echar pintura negra en los hocicos, verter spray de cabello en los lomos o pegar chicle en alguna parte del cuerpo.The Telegraph ha señalado que estos sabotajes y ataques no son nuevos, aunque aclara que se han incrementado.
El rotativo británico recuerda que en 1978 un chow chow fue encontrado muerto por efecto de un potente raticida y que en 1993 un poddle fue rociado con ácido, lo cual le causó graves quemaduras en buena parte del cuerpo.
Se resisten a creerlo
En el caso que hoy ya tiene ocupada a la policía británica, se puede decir que Jagger quedó en segundo lugar de la categoría de setter irlandeses, que este año estuvo especialmente peleada por la alta cantidad de perros concursantes.
Por el momento, no se descarta ninguna pista, incluso hay una que dice que el objetivo no era eliminar a Jagger sino a su hermano, un ganador nato de concursos previos y que hubo una confusión.
Jeremy Bott señala que el envenenador es alguien que odia a los perros o toda la parafernalia que rodea esta fastuosa exhibición. Se niega a pensar que el autor sea algún concursante. En la misma línea se ha expresado Dee Milligan, presidenta del evento: "No podemos creer que esto haya sido el acto de algún exhibidor. Si lo creyéramos, no podríamos continuar y los últimos 30 años hubieran sido desperdiciados".
¿Exceso de inocencia? El tiempo y las investigaciones lo dirán.
El premio más reputado
Este concurso se desarrolla anualmente desde la época de la reina Victoria. Su primera edición data de 1891. Unos 22 mil perros compitieron este año en el Birmingham Genting Arena, entre ellos 2,980 provenientes de fuera de Gran Bretaña.
Los organizadores de Crufts, El Kennel Club, calcula que en la edición de este 2015 hubo unos 160 mil espectadores. Los asistentes al evento en el 2014 gastaron unos 30 millones de libras esterlinas ($45 mdd) durante los días de competencia. El premio máximo en las distintas categorías apenas roza los 450 dólares, pero el prestigio para el ganador es inconmensurable.