En los municipios de San Pedro y Francisco I. Madero no es alarmante el contagio de dengue o chikungunya, pues sólo se tiene un caso confirmado del primero.
El problema al que se enfrenta el personal de la Jurisdicción Sanitaria número siete es la negativa de la misma ciudadanía a permitir que se lleven a cabo las campañas de prevención.
La epidemióloga de la dependencia, Nadia Mendoza Hernández, explicó que desafortunadamente no hay disposición de la ciudadanía en participar en las campañas para evitar la proliferación del mosco Aedes Aegypti, pues en muchos sectores donde las brigadas de vectores realizan su trabajo, se les impide el acceso a los domicilios o dañan las ovitrampas que sirven para medir la proliferación del mosco en el ambiente.
"Nosotros somos un área o una región en donde el mosco ya se adaptó y desafortunadamente estamos dentro de los casos esperados. Por eso reforzamos las acciones, tenemos un programa permanente para disminuir la cantidad de personas afectadas, pero a veces es imposible, porque muchas de las veces cuando los vectores andan trabajando les niegan el acceso a las casas. Hemos batallado con eso", dijo la doctora.
No participan
Las personas no permiten el acceso a los domicilios al personal de vectores para fumigar o descacharrizar, además se roban las ovitrampas y las utilizan como macetas