Proyecto. Con las medidas miles de trabajadors indocumentados tendrán sus salarios protegidos.
El Concejo de Nueva York aprobó ayer una ley que protegerá los salarios de los miles de trabajadores, muchos de ellos inmigrantes indocumentados que se desempeñan en el negocio de los lavados de autos de la ciudad.
Impulsada por la lideresa del Concejo local Melissa Mark-Viverito, la ley pretende poner un alto al abuso laboral en los lavados de autos, caracterizado por robo de salario, despidos injustificados, nula protección ante el uso de productos tóxicos y maltrato general.
Rocío Valerio, del organismo civil Se Hace Camino Nueva York, uno de los impulsores de la campaña para aprobar la ley, expresó que la industria de los lavados de autos se caracteriza por "un extendido robo de salario y por mantener de manera constante a los trabajadores en condiciones deplorables".
La ley beneficiaría a unos cinco mil trabajadores de los cerca de 200 establecimientos de lavado de autos de la ciudad, según precisó Renata Pumarol, portavoz de Se Hace Camino Nueva York. La gran mayoría de estos empleados es inmigrante, acotó Pumarol.
De acuerdo con la nueva legislación, estos establecimientos requerirán de una licencia para funcionar, la cual les puede ser revocada por violaciones a las normas ambientales, robos de salarios o por violar las disposiciones para proteger el agua o los sistemas de drenaje.
Miguel Portillo, empleado de un negocio de lavado de autos del condado de Queens, indicó que llegó a ganar 5.50 dólares por hora (el salario mínimo de Nueva York es de 7.75 dólares por hora), además de que no obtenía pago por tiempo extra y de que su empleador le robaba sus propinas.
