Nacional Salario mínimo Seguridad Narcotráfico Generación Z Pensión Bienestar

Obama ofrece su apoyo a Peña Nieto

AFIRMA EL PRESIDENTE QUE SIENTE EL RESPALDO DEL PAÍS VECINO

Junta. Momento de la reunión entre los presidentes Peña y Obama en la Casa Blanca.

Junta. Momento de la reunión entre los presidentes Peña y Obama en la Casa Blanca.

AGENCIAS

El presidente de México, Enrique Peña Nieto, admitió ayer en Washington que el "claro reto" para su país es combatir más eficazmente al crimen organizado, tarea para la que le ofreció apoyo su homólogo estadounidense, Barack Obama, que prometió seguir insistiendo en la defensa de los derechos humanos en Cuba.

Obama recibió al mandatario mexicano en la Casa Blanca, en la primera reunión entre ambos desde la desaparición en septiembre de 43 estudiantes en el municipio de Iguala, presuntamente a manos de policías locales y miembros del crimen organizado.

Ese caso ha provocado una ola de protestas en México y una grave crisis de credibilidad del Gobierno de Peña Nieto, quien sin mencionar expresamente los sucesos de Iguala reconoció, desde el Despacho Oval, que es necesario "combatir con mayor eficacia y contundencia al crimen organizado".

Al respecto, Obama se refirió a esas desapariciones como trágicas y reiteró el compromiso de Estados Unidos para ayudar a México a luchar contra el "flagelo" de la violencia crimen organizado y de los cárteles del narcotráfico, aunque matizó que la aplicación de la ley es, en última instancia, responsabilidad de las autoridades de ese país.

Mientras Obama y Peña Nieto estaban reunidos en el Despacho Oval, cerca de medio centenar de manifestantes se concentró ante la Casa Blanca para protestar contra el presidente mexicano y exigir respuestas por la desaparición de los estudiantes.

Un día antes de la reunión, la organización Human Rights Watch (HRW) urgió a Obama a exigir "más seriedad" a Peña Nieto ante los abusos cometidos por fuerzas de seguridad en México, así como a supeditar la entrega de parte de los fondos de la Iniciativa Mérida a avances en procesos penales.

Los dos mandatarios hablaron también de Cuba, a raíz del anuncio en diciembre de Obama y el presidente cubano, Raúl Castro, para iniciar un proceso de normalización de las relaciones diplomáticas entre los dos países, rotas desde 1962.

Obama volvió a defender su decisión de poner en marcha una política "más constructiva" hacia Cuba que, no obstante, "continuará enfatizando" el respeto a los derechos humanos, la democracia y la libertad política.

Según Obama, su objetivo es "insistir" en ello cuando asista en abril a la Cumbre de las Américas que acogerá Panamá y a la que Cuba ha sido invitada.

La disidente Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN) señaló este lunes que en 2014 se produjeron en la isla 8,899 detenciones arbitrarias por motivos políticos, unas 2,500 más que el año anterior.

Por su parte, Peña Nieto felicitó a Obama por esa decisión "audaz" para normalizar las relaciones con La Habana y aseguró que México "será un incansable promotor de la buena vecindad" entre Estados Unidos y Cuba.

Peña Nieto también calificó de "audaz" y de "acto de justicia" las acciones ejecutivas que anunció Obama en noviembre para regularizar temporalmente a unos 5 de los 11 millones de inmigrantes indocumentados que residen en Estaos Unidos, muchos de ellos mexicanos.

El mandatario explicó que su Gobierno ayudará a todos los mexicanos que quieran y cumplan con los requisitos para beneficiarse de esas acciones a conseguir la documentación necesaria.

Además, Peña Nieto se comprometió a mantener controlada y vigilada la frontera entre ambos países.

De hecho, según la Casa Blanca, entre los acuerdos sellados en esta visita de Peña Nieto a Washington está el de la modernización de varias instalaciones fronterizas.

Obama también mencionó la crisis vivida a mediados del pasado año con la llegada masiva de menores no acompañados, la mayoría centroamericanos, a la frontera sur y dijo que los "esfuerzos" de México han contribuido a reducir las cifras "a niveles mucho más manejables".

Antes de la reunión entre Obama y Peña Nieto, los Gobiernos de ambos países celebraron una nueva ronda de su Diálogo Económico de Alto Nivel, creado en 2013.

El vicepresidente de EU, Joe Biden, quien pronosticó que Norteamérica puede convertirse en un "epicentro" energético del mundo, presidió ese diálogo junto al secretario de Hacienda de México, Luis Videgaray.

En el marco de ese diálogo se esperaba un acuerdo para "duplicar" el capital del Banco de Desarrollo de Norteamérica (NADbank), creado en 1994 y que financia proyectos medioambientales en la frontera entre los dos países.

Asimismo, las delegaciones de ambas naciones preveían dialogar de la modernización de un acuerdo de aviación civil bilateral, que entrará en vigor "probablemente a finales de 2015", según fuentes estadounidenses.

Honra a soldados norteamericanos

El presidente de México, Enrique Peña Nieto, concluyó ayer su visita oficial a Washington honrando con flores en un solemne acto en el cementerio nacional de Arlington a los soldados de Estados Unidos caídos en combate.

El presidente, tras reunirse con su homólogo estadounidense, Barack Obama, se trasladó al cementerio de Arlington, situado sobre una colina frente a la ciudad de Washington, a orillas del río Potomac en Arlington (Virginia), y en el que yacen más de 400,000 soldados estadounidenses y sus familias.

Las 252 hectáreas del cementerio también acogen diversos memoriales y tumbas como la del presidente John Fitzgerald Kennedy, que descansa junto a sus hermanos Edward y Bob Kennedy y donde arde desde hace 50 años la conocida "Llama eterna".

El sonido de los cañones anunció la llegada de Peña Nieto, que fue recibido por el comandante mayor del distrito de Washington, Jeffrey S.Buchanan, y por decenas de militares estadounidenses que flanqueaban la escalinata que conduce a la tumba del soldado desconocido.

Hasta allí subieron Peña Nieto y Buchanan seguidos por la delegación que forma parte de la visita del presidente a Washington y que estaba encabezada por tres soldados que sostenían la bandera mexicana.

Peña Nieto depositó a los pies de la sarcófago blanco de mármol una corona de flores y escuchó en solemne quietud el toque de silencio de una trompeta, sintonía tradicional en honores militares y cuyo origen se remonta a la Guerra Civil estadounidense (1861-1865).

Posteriormente, visitó el memorial que se encuentra tras la tumba y que es uno de los lugares principales para honrar a los militares estadounidenses fallecidos en acto de servicio.

Tras unos minutos dentro, Peña Nieto salió y saludó la bandera mexicana y luego abordó un vehículo negro para partir de regreso a su país.

El sonido de cañones despidió al presidente, que con la ofrenda floral cerró su visita a Washington.

El simbólico camposanto de Arlington fue inaugurado y establecido como cementerio nacional en 1864, durante la guerra civil estadounidense, aunque la tumba del soldado desconocido fue construida después de la Primera Guerra Mundial.

Tres estatuas que representan la paz, la victoria y el valor custodian la tumba blanca del soldado desconocido, marcada por las palabras: "Aquí descansa en honor y gloria un soldado estadounidense conocido solo por Dios".

Antes de este acto, el presidente de México, Enrique Peña Nieto, mantuvo un encuentro ayer con su homólogo estadounidense, Barack Obama, en el que admitió que un "claro reto" para su país es combatir más eficazmente al crimen organizado.

Leer más de Nacional

Escrito en: Obama EPN EPN en EU

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Nacional

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Junta. Momento de la reunión entre los presidentes Peña y Obama en la Casa Blanca.

Clasificados

ID: 1074433

elsiglo.mx